Carlos Alcaraz ponderó la conquista del título en el Argentina Open y sostuvo que es "muy bueno comenzar así su temporada" en Buenos Aires luego de una lesión que le imposibilitó estar en el primer Grand Slam del año en Melbourne.
"Me encuentro muy bien pero es bueno comenzar mi temporada con un título. A partir del triunfo ante Dusan (Lajovic) en los cuartos de final parecía que no había parado de competir; me sentía muy bien tanto a nivel físico, como de tenis y mental. Por ende me llevo muchas cosas positivas de este torneo y de cada partido que es bueno de cara a la gira sudamericana que se viene", afirmó el español en conferencia de prensa.
"No encuentro mucha diferencia a los demás pistas y no la encuentro excesivamente lenta y la he notado bastante bien y un tema en la semana ha sido el calor. No me ha dicho nada Juan Carlos (Ferrero) sobre la historia de este torneo pero sé que es el top tres de los más antiguos y ha sido muy bueno ganarlo", agregó el tenista de apenas 19 años que se transformó en el más joven en conquistar el Argentina Open.
"La verdad que espero un bonito año donde defiendo algunos títulos y nos esperan bonitos torneos. Estoy peleando por el número uno con Djokovic y Tsitsipas que son los que están más cerca pero no significa que por detrás no vengan otros jugadores porque hay un abanico de siete a nueve jugadores de posibles ganadores de torneos de Grand Slam y pelear por estar en lo más alto del ranking", expresó con respecto a sus expectativas de este 2023.
"Como he dicho en más de una ocasión intento disfrutar porque intento jugar al tenis que es a lo que he venido tanto a disfrutar como a competir. Intento hacer cosas nuevas que quizás no están tan acostumbrados en el circuito como inventar en la pista para disfrutar y pasármelo bien que es el objetivo", expresó el ex número uno del mundo y actual dos de la clasificación ATP.
"La verdad que la afición argentina fue espectacular. Me esperaba un recibimiento bueno y que estuvieran detrás mío y han superado con creces las expectativas que tenía en Buenos Aires. Es impresionante la pasión que tienen en este país por el tenis y el deporte, que me hace llevar un buen bonito recuerdo de mi paso por aquí", dijo el vencedor del título tras su victoria en la final ante el británico Cameron Norrie.
"Creo que tanto cabeza, corazón y cojones se necesitan para ganar un título. Todas por igual y hay que tener las tres por igual para levantar un trofeo. Intento trabajar día a día en cada entrenamiento el nivel mental. Y recuerdo a los míos: mi equipo, mi familia, mis amigos porque cuando no estoy jugando al tenis me considero un chico normal. Intento no meterme la presión de ser el más joven de ganar un torneo y ser el número uno. Voy a la pista para pasarlo bien y jugar por mi equipo e intentar mejorar que es el objetivo", agregó el tenista que sumó la séptima corona de su carrera, lo que lo suma en un podio particular.
"Hay que intentar poner al otro en problemas. La potencia y la precisión son los dos elementos que ponen al rival en inconvenientes. Entonces el objetivo es tirar fuerte y a las líneas. Esto es un ajedrez de intentar llevar al de enfrente de un lado al otro y que corra para conseguir el objetivo", completó el tenista que seguirá su carrera sudamericana la semana próxima en el Río Open, un 500 en el que defenderá el título.