La historia entre Roger Federer y Rafael Nadal ostenta, sin lugar a dudas, una incontable cantidad de puntazos y grandes momentos que merecen ser destacados. Sin embargo, hay un punto muy particular en esta rivalidad que merece ser destacado por sobre muchos otros en estos últimos 20 años de tenis.
En el Australian Open 2017, en el marco de la gran final del primer torneo de Grand Slam de la temporada, cuando el encuentro iba igualado en sets (dos por lado) y muy parejo en la definición de la quinta manga (4-3 a favor del suizo y 40-40), el mejor tenis de dos de los mejores jugadores de todos los tiempos floreció en Melbourne.
Federer y Nadal protagonizaron un rally de antología en Melbourne en 2017.
El punto en cuestión fue un impresionante rally de 26 tiros, donde se vieron reveces por ambos lados, defensas desde el fondo de la cancha y pura garra por parte de los dos jugadores. Sin lugar a dudas, una obra de arte protagonizada por la gran rivalidad del siglo XXI, que quedó del lado del nacido en Basilea.
Ese game, con saque para el manacorí, terminó en poder de Federer quien luego usaría su servicio para ganar por anteúltima vez el Australian Open. Este fue, además, su 18° título de Grand Slam. Un año después, conquistaría su último major.