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Las Finales de la NBA distan de estar decididas

CLEVELAND -- Los Golden State Warriors ganaron sin despeinarse los primeros dos partidos de las Finales NBA, pero saben que la serie dista de terminar y que cuando se reanuden los partidos en Cleveland, los Cavaliers estarán listos para competir.

Los Warriors han jugado un básquetbol, en especial en el primer partido, que parece difícil de superar, aunque ellos mismos reconocen que tienen tarea pendiente.

"No podemos perder el enfoque", dijo Kevin Durant el domingo después de la victoria en el Juego 2 sobre los Cavaliers. "Ellos comenzaron rápido al principio y estuvieron bien en la pintura. Creo que tenemos que mejorar en ese aspecto. No podemos regalar 23 puntos producto de nuestras entregas de balón, en especial contra un equipo campeón como ese. Ellos van a salir mucho mejor allá (Cleveland).

Durant es la principal razón por la que los Warriors llegarán este lunes a Cleveland con la ventaja 2-0 y, sobre todo, con un paso tan dominante capaz de vencer también mentalmente al rival.

En todos los aspectos del juego, ataque y defensa, supera con creces el jugador que contrataron los Warriors para tratar de conquistar el título que los Cavaliers les arrebataron la temporada pasada.

Durant tiene razón. Es poco probable que con 20 balones perdidos o con 20 puntos menos en la pintura que los Cavaliers puedan ganar con tanta facilidad aparente.

"Sólo estoy tratando de dar mi mejor esfuerzo para ayudar", señaló Durant. "Sólo pienso en el juego de este miércoles. Lo demás sólo queda atrás. Trato de jugar duro en cada posesión. Voy a cometer errores pero no me voy a desmotivar porque los muchachos encestan sobre mí o tampoco voy a rendirme porque tengo problemas en la primera jugada del partido".

Los Warriors impusieron ya marca de triunfos en fila en postemporada y el domingo fue su décimo segundo triunfo por 10 puntos o más en los actuales playoffs. Implantaron un nuevo récord de triples (18) en un partido de Finales de la NBA.

Sus 132 puntos en el Juego 2 son la mayor cantidad en un juego de Finales desde el 4 de junio de 1987 cuando los Lakers anotaron 141 ante Celtics.

Peor para los Cavaliers, el entrenador en jefe de Golden State, Steve Kerr, está de vuelta en el banquillo y Kyle Thompson despertó del bajón ofensivo que tenía. Anotó 22 puntos el domingo.

Stephen Curry logró el domingo el primer triple doble de su carrera en postemporada y Draymond Green parece que está más maduro y tranquilo que nunca, tratando de evitar algún problema como la suspensión del año pasado.

"Sólo estoy jugando básquetbol", dijo Green. "Cuando tienes grandes compañeros como yo, que me permiten jugar con mis emociones y me permiten ser sentimental cuando hablo con ellos, entonces uso esas emociones para mejorar".

"Sólo trato de liderar este equipo tanto como pueda a mi manera", añadió. "Sin preocuparme del arbitraje y esas cosas. Soy un tipo listo y aprendí mi lección".

El entrenador de los Cavaliers, Tyronn Lue, también reconoce que hay tarea por hacer y es obvio que más aún que los Warriors, desde mejoras en el plan de juego hasta el desempeño y rendimiento individual.

Es difícil pensar que los Cavaliers van a remontar, como hicieron el año pasado, cuando también llegaron abajo 0-2 a Cleveland, con marcadores de 15 y 33 puntos de diferencia, para al final conquistar el campeonato en siete partidos.

"Ellos hicieron lo que se suponía debían hacer, ganar en su casa, donde es muy difícil derrotarlos", dijo Lue. "Sabíamos que iba a ser muy difícil, al venir a este ambiente tan rudo, pero ellos ganaron los dos primeros partidos. Ahora tenemos oportunidad de ir a casa, frente a nuestra multitud donde también jugamos bien. Así que ellos ganaron dos partidos, ahora tenemos que irnos a casa a reagruparnos".

El año pasado gestaron su histórico título sin que enfrentaran a Durant, quien aún era parte del Oklahoma City Thunder. En el quinto juego también extrañaron a Draymond Green, quien fue suspendido un partido por acumulación de faltas flagrantes.

"Son un equipo diferente", mencionó LeBron James el domingo por la noche. "Debemos jugar con más sentido de urgencia y desesperación en cuanto lleguemos a casa. Sabemos que se puede porque lo hemos hecho".

Los Warriors son el cuarto equipo que gana los primeros dos partidos de las Finales por al menos 15 puntos. En las anteriores tres series de campeonato, sólo uno, se quedó corto del título y fueron precisamente ellos.

"Tendremos que jugar mucho mejor, casi perfecto", agregó. "No puedes cometer errores porque te hacen pagar. Pero sabemos que se puede". De las siete ocasiones previas que estuvieron abajo 0-2 en series de postemporada al mejor siete, los Cavaliers sólo ganaron dos.

"Todos en el mundo piensa que esto terminó", dijo el guardia de los Warriors, Shaun Livingston. "No, esto no ha terminado. Lo vimos el año pasado. Hemos estado aquí. Los muchachos que estuvieron aquí hace un año lo entienden. Lo más difícil de hacer es cerrar la serie y tenemos dos partidos más que ganar. Debemos llevarnos esa mentalidad a Cleveland".

Es la tercera vez en la carrera de James que su equipo tiene desventaja de 0-2 en Finales de la NBA (2007, 2016, 2017). Y conquistó el título el año pasado.