BOSTON – El desfile de celebración del campeonato de Serie Mundial de 2018 de los Medias Rojas de Boston tuvo un poco de todo el miércoles, 31 de octubre, un Día de las Brujas muy especial para los aficionados patirrojos, que celebraron su cuarto anillo en los últimos 15 años.
Antes de que comenzara la celebración, el dueño mayoritario de los Medias Rojas, John Henry, y el presidente ejecutivo, Tom Werner, publicaron un emotivo mensaje en redes sociales en honor a toda su afición, el cual leyó en parte: “Juntos, hicimos historia. Ustedes estuvieron con nosotros a cada paso de este extraordinario viaje.
Desde el primer día de los entrenamientos primaverales, cuando Alex Cora declaró proféticamente que este era ‘un grupo especial de jugadores’, ustedes recibieron con brazos abiertos a este equipo. No hubiéramos llegado a la cima sin su pasión, devoción y fe en nosotros. Por eso estaremos siempre agradecidos”.
Las festividades iniciaron con una ceremonia de apertura en Fenway Park, donde el dirigente Alex Cora se encargó de incitar a la multitud burlándose de sus archirrivales, los Yankees de Nueva York, recordando cómo todo el mundo pensaba que Boston sería eliminado después de caer en el segundo partido de la Serie Divisional contra la novena neoyorquina.
“Después de eso anotamos 16 carreras en el estadio de los Yankees (en el tercer juego de la serie). ¡Chúpense esa!”, exclamó Cora para el deleite de la multitud.
“Gracias por todo, por todo el apoyo. Ha sido una temporada histórica y todos ustedes la hicieron muy especial, así que felicidades a ustedes tambien y espero se estén disfrutando este momento”, continuó el dirigente puertorriqueño, quien ganó un campeonato como jugador con los Medias Rojas en 2007, al igual que como coach de banca de los Astros de Houston el año pasado.
“Como he dicho desde el primer día, el béisbol aquí en Boston es una locura. Ustedes lo viven las 24 horas, los siete días de la semana; siempre con enormes expectativas. Pero les voy a decir algo, las mismas expectativas que ustedes tienen, la tienen esos jugadores que están aquí, ¡y por eso son los campeones mundiales!”
El desfile, que tuvo una duración de aproximadamente dos horas, arrancó a las 11 de la mañana, hora del este, en la calle Lansdowne, en la parte posterior del legendario Fenway Park, y se trasladó por la calle Boylston hasta el centro de la ciudad, finalizando con una magna celebración en la alcaldía de Boston.
Las calles estuvieron atestadas de aficionados, estimados en cerca de un millón de personas vitoreando los numerosos botes sobre ruedas llamados “duck boats” sirviendo como carrozas.
Cerca de 25 botes cargaron con los 40 peloteros activos de los Medias Rojas, además de los miembros del cuerpo de entrenadores de Alex Cora, al igual que integrantes de la alta gerencia del equipo, incluido Henry, Werner, el presidente de operaciones Dave Dombrowski, al igual que el director ejecutivo y presidente, Sam Kennedy.
También hubo invitados muy especiales, entre ellos los legendarios peloteros David Ortiz y Pedro Martínez, dos de los representantes de los otros tres equipos de los Medias Rojas ganadores de la Serie Mundial desde 2004. Los astros dominicanos se gozaron la celebración, en particular al ser junto al primer dirigente minoría en los 117 años de la franquicia, el puertorriqueño Cora.
“Yo tengo un orgullo inmenso y una satisfacción tan grata y tan grande por Álex, porque encima que es mi hermanito, jugamos juntos y tenemos una relación increíble. Y Alex desde cuando era un jugador activo era un hombre de béisbol”, indicó el ‘Big Papi’ en entrevista con ESPN Digital. “Y viendo cómo ha resurgido todo y el resultado de todo eso me da una satisfacción increíble.
“Yo estoy aquí celebrando porque seré Red Sox por el resto de mi vida, y mientras esta organización esté ganando campeonatos es como si uno estuviera ahí en el terreno con ellos”, agregó Ortiz.
Cora lideró el desfile desde uno de los primeros botes sobre ruedas, cargando con el trofeo de campeón de la edición 114 del Clásico de Otoño. Allí estuvo acompañado por numerosos miembros de su familia, incluida su madre y hermana, su prometida Angélica, además de tres de sus hijos, su hija Camila, de 15 años, y sus pequeños mellizos, Xander e Isander, de año y medio de edad.
Al vencer a los Dodgers el pasado domingo, Cora se convirtió en el segundo dirigente latino, y el primer puertorriqueño, en ganar un anillo de Serie Mundial después que fue logrado por el venezolano Ozzie Guillén con los Medias Blancas de Chicago en 2005.
Los Medias Rojas finalizaron la campaña regular con 108 victorias, el mayor número en la historia de la franquicia, y en la postemporada finalizaron con un récord de 11-3, incluyendo haber ganado ocho de sus últimos nueve partidos de playoffs, lo cual llevó al dueño del equipo a considerarlo el mejor de todos los tiempos.
“Yo entiendo que sí, porque el resultado es el que habla”, agregó Ortiz, concordando con la opinión de Henry. “Estos muchachos lo que hicieron este año fue algo extremadamente impresionante. Tener una temporada así hasta el final como la que ellos tuvieron eso es algo sin límite”.