El piloto bonaerense, de gran campaña en carreras de resistencia, está en conversaciones con tres equipos para sumarse a la categoría en 2025.
Después de correr en Fórmula Renault en la Argentina, Nicolás Varrone armó el bolso a los 17 años y en 2018 se instaló en Europa para seguir su carrera en el automovilismo. Tras pasar por la F3 Británica, se metió en el mundo de las carreras de resistencia y brilló. Fue tercero en la Le Mans Cup de 2021 y campeón 2023 del WEC LMGTE Am como piloto Corvette. A su palmarés le sumó el triunfo en las 24 Horas de Le Mans 2023 en LMGTE Am y este año fue cuarto en LMP2, liderando la categoría Am dentro de la divisional. Para este año, el piloto de nacido en Ingeniero Mashwitz tenía todo abrochado para disputar la temporada de IMSA (campeonato de resistencia en Estados Unidos), pero todo se complicó repentinamente cuando el dueño del auto decidió retirarse tras las dos primeras citas (Daytona y Sebring). La situación lo complicó, porque, si bien sigue con vínculo firmado con Corvette (marca que pertenece a General Motors) no quedaron butacas libres.
Su palmarés le abrió puertas y así se dio la chance de correr en las 24 Horas de Nürburgring y recibió el llamado para correr con Ferrari en European Le Mans Series. Además, ya tenía cerrada su participación en las 24 de Le Mans y fue justo después de esa competencia que se le abrió una chance muy concreta de correr en IndyCar en 2025. Justo pocos días después de conocerse la salida intempestiva de Agustín Canapino tras la recisión del vínculo con Juncos Hollinger Racing, Varrone podría llegar a la categoría más importante de monopostos de Estados Unidos. En charla con ESPN.com, el bonaerense contó cómo surgió la posibilidad.
“Siempre dije que quería ir para el lado de IndyCar. Todo arrancó cuando fui a correr las Seis horas de Watkins Glen de IMSA en LMP2, que fue a la semana siguiente de ganar las 24 de Le Mans en LMP2 Am. Fui con el equipo Dragonspeed, que estuvo en IndyCar un par de temporadas. Elton Julian, el dueño, se quedó muy contento con mi rendimiento y yo le pregunté por IndyCar. Y a partir de ahí él nos dio una mano para poner mi nombre y estamos en conversaciones con algunos equipos. Julian tuvo en su auto de LMP2 a Colton Herta, Pato O’Ward, Rinus Veekay y me dijo que estaba al nivel de ellos. Ahí empezó a traccionar. Estamos en conversaciones con tres equipos, no puedo decir cuáles, pero está avanzando. Espero poder tener una prueba en el futuro cercano para armar 2025, pero todavía no hay nada confirmado.
-¿Cómo es el tema del presupuesto para poder cerrar con alguno de esos equipos?
-Los tres equipos tienen interés en que yo vaya, así que es un presupuesto más accesible de lo que podría ser sin ese interés. Y tenemos inversores con ganas de sumarse al proyecto de IndyCar. Faltan detalles del contrato y cosas que hay que hablar allá, pero de eso se encarga mi mánager así yo me concentro en lo que me queda este año en el ELMS. Pero hay inversores con interés de sumarse.
-¿Qué haya estado Agustín Canapino recientemente suma en tu proyecto? ¿Puso a la Argentina en el mercado?
-Lo mío es diferente. Lo de IndyCar llega por mi carrera en Europa y la de muchos pilotos que van de Europa a Indy desde el mundo de resistencia y que les va muy bien, saben que el nivel de Europa es bueno. Y yo corrí en IMSA en Estados Unidos. Así que, mi posibilidad llega por ese lado, diferente a lo que pasó con Agustín. Obvio que siempre sirve que haya argentinos que anden por el mundo y algún impacto tiene, pero lo mío llega por otro lado.
-¿IndyCar es tu plan A para 2025?
-Es una de las opciones. Llegar ahí es mi sueño. Pero también tengo una linda carrera en resistencia y hay una chance de Hypercar, así que hay lugares abiertos en los dos lados. Así que se evaluará cuál es la mejor opción para mi carrera y para mí como piloto. Hay que ver qué pasa en estos meses.
-¿Dentro de Hypercar en WEC la chance es Cadillac, por tu vínculo con GM?
-Hay varios frentes. No es solo de Cadillac, que es lo más obvio porque soy piloto Corvette. Pero hay otras ofertas, así que hay que seguir en las charlas que estamos teniendo para ver con quién se cierra.
-Varios pilotos de IndyCar tienen doble programa en el año, ¿sería volar mucho pensar en eso para tu 2025?
-Sí, hay varios que hacen dos calendarios con IMSA o alguna más como Le Mans. Tal vez sería volar demasiado, o tal vez no. Pero para 2025 sería una u otra.
-Después de lo que te pasó este año, con el proyecto trunco en IMSA, ¿cuál es tu fecha límite para asegurarte el 2025?
-Uno va aprendiendo con el tiempo y, si bien no hay que dormirse hasta diciembre porque es tarde, a veces es mejor dejar fluir y esperar porque en ocasiones te apurás a cerrar algo y no es lo mejor, porque después surgen otras cosas. No hay una fecha, hay que ser paciente y ver las oportunidades. Es un tira y afloje que hay que saber hasta qué punto jugarlo.
-¿Si se da IndyCar, sería calendario completo, con los óvalos?
-Sí, es la idea.
