La historia brinda antecedentes, pero no garantiza nada en el presente. Y menos en los deportes. Cuba, la única finalista olímpica en cada uno de los cinco torneos oficiales (Barcelona 1992, Atlanta 1996, Sídney 2000, Atenas 2004 y Beijing 2008), tiene una historia insuperable en el béisbol a nivel de selecciones nacionales desde 1926, pero a la otrora potencia no parece que le alcanzará para agenciarse el único cupo que otorga el torneo preolímpico de las Américas que se desarrollará entre el 31 de mayo y el 5 de junio en Florida.
Desde hace tiempo que la selección cubana dejó de ser protagonista en eventos internacionales para convertirse en mera espectadora e, incluso, llegando al ridículo, como en los Juegos Panamericanos de Lima 2019, donde terminó en sexto lugar.