OWINGS MILLS -- Marshal Yanda anunciará su retiro el miércoles, cerrando una de las carreras más condecoradas en la historia de la NFL para un guardia.
Yanda, de 35 años de edad, jugó la totalidad de sus 13 temporadas con los Baltimore Ravens, ganándose una reputación por su dureza, técnica y ética de trabajo. La experimentada ancla de la línea ofensiva de Baltimore, Yanda contempló despedirse del juego la temporada pasada, pero regresó para ayudar a los Ravens imponer un récord de la NFL por yardas terrestres como equipo para una campaña (3,296), así como la marca de la franquicia por puntos anotados (531).
Hará su anuncio oficial a las 11 a.m. tiempo del Este el miércoles, acompañado por el gerente general Eric DeCosta, vicepresidente Ozzie Newsome, y head coach John Harbaugh.
Forever a Raven.
— Baltimore Ravens (@Ravens) March 10, 2020
After 13 incredible seasons, Marshal Yanda is calling it a career. pic.twitter.com/rMCIfJZoFm
Un recluta de tercera ronda del 2007, Yanda es uno de tres guardias en la historia de la NFL en obtener al menos ocho selecciones al Pro Bowl como guardia, y ganar un Super Bowl. Los otros son Larry Allen y Alan Faneca.
El retiro de Yanda libera 7 millones de dólares en espacio bajo el tope salarial, pero deja un hueco enorme en el guardia derecho. Baltimore podría buscar ocupar el sitio de Yanda con Ben Powers, un recluta de cuarta ronda del año pasado, o mediante la agencia libre o el draft.
Yanda nunca fue conocido por ser el liniero ofensivo más atlético. No fue un gran espécimen físico. Existe una razón por la cual fue el décimo liniero ofensivo elegido en el draft de hace 13 años.
Pero pocos se desempeñaron en la posición con tanta convicción, determinación y comprensión como Yanda. Aportó la fuerza de campo que obtuvo siendo criado desde niño en una granja de cerdos en Iowa. Un poderoso bloqueador por tierra, Yanda era conocido por sacar, en ocasiones, hasta a tres defensivos del camino para abrir un carril para defender. Un bloqueador en situaciones de pase de primera línea, regularmente permitía la menor cantidad de capturas para su posición.
En el 2014, el entonces coordinador ofensivo Gary Kubiak dijo que Yanda era tan bueno como cualquier liniero ofensivo que haya conocido. En el 2015, Harbaugh ofreció una predicción.
"Es simplemente un humano especial y un jugador especial", dijo Harbaugh, "y estará en el Salón de la Fama algún día".
Yanda es el segundo mejor liniero ofensivo en la historia de la franquicia, detrás del tackle izquierdo miembro del Salón de la Fama, Jonathan Ogden. Se ganó invitaciones al Pro Bowl en ocho de las pasadas nueve temporadas, solamente fallando en el 2017 cuando se perdió 14 encuentros por una lesión de tobillo.
"Yanda ha sido uno de los mejores guardias que he visto en mi carrera a lo largo de los últimos 10 años", dijo la temporada pasada el head coach de los 49ers, Kyle Shanahan.
Yanda también se ha convertido en el epítome de la dureza. Las historias sobre la fortaleza de Yanda alcanzan status de leyenda en Baltimore.
Durante su temporada de novato, Yanda se ofreció para soportar tres disparos de una pistola paralizante para ganar 600 dólares de una apuesta. Sorpresivamente, esa no fue la mayor muestra de su tolerancia al dolor.
Cerca del final de la campaña del 2012, Yanda desarrollo síndrome compartimental, que puede resultar en la pérdida de una extremidad si no se trata, y estaba de vuelta en el campo un partido después de que un cirujano dividió un músculo en la parte baja de su pierna para aliviar el dolor.
"Simplemente tengo gran respeto por él y su trabajo y el modo en que juega. Siempre lo he tenido", dijo el head coach de los Steelers, Mike Tomlin. "Es obvio que él es el latido de la unidad y lo ha suido por largo tiempo".
El respeto por Yanda se extiende desde la cima de la organización de los Ravens. En las prácticas, Yanda era la primera persona en recibir el saludo de choque de puños del propietario Steve Bisciotti. Durante el minicampamento del año pasado, Yanda y DeCosta frecuentemente charlaban en las laterales.
Los compañeros veían asombrados el modo en que Yanda ejecutaba cada ejercicio con el mismo enfoque. Se mantuvo siempre con la misma rutina, pasando tiempo en la tina caliente y comiendo su desayuno siempre a la misma hora, sin falla.
Si un jugador de los Ravens deseaba saber cómo estudiar video o cómo trabajar en el gimnasio, oficiales del equipo simplemente señalaban a Yanda.
"A Marshal le importan los jugadores y le importa la gente, pero sobre todo, le importan los malditos que pueden jugar este deporte", dijo el linebacker de los Ravens, Matthew Judon. "Es como, 'Si no puedes con el juego, cállate y deja de quejarte. Haz tu parte'. Cuando descubre que puedes jugar, se abre un poco más contigo".
Yanda admitió que pensaba en el retiro hacia el final de la campaña del 2018, pero regresó porque terminó sano la temporada. Luego, accedió a sumar otro año a su contrato (está firmado hasta este 2020), aunque actuó como si se tratara de su temporada final.
Conocido por ser un liniero ofensivo de vieja escuela, Yanda bromeaba más durante la temporada pasada que en años anteriores. Luego de la victoria de los Ravens sobre los New England Patriots en la Semana 9, Yanda entró al vestidor, levantó a DeCosta en lo que Harbaugh describió más tarde como un "doble suplex de lucha libre". Yanda salió de su zona de confort todavía más cuando tomó el sitio de Terrell Suggs dando el discurso final a sus compañeros justo antes de comenzar los partidos.
Lo que nunca cambió fue su desempeño sobre el campo. Sus ocho Pro Bowls son la mayor cantidad entre guardias en activo. En su temporada final, fue nombrado al segundo equipo All-Pro luego de permitir una captura y abrir huecos para el ataque terrestre más prolífico de la historia.
"Cuando le diga a mi hijo o hija sobre jugar fútbol americano, les diré que fue uno de los mejores guardias contra quienes jugué en esta liga", dijo el tackle ofensivo de los Bengals, Geno Atkins. "Tiene rudeza. Tiene juego físico, pero también fineza. Es el paquete completo".