El corredor de Baltimore, J.K. Dobbins, se someterá a una resonancia magnética, pero la expectativa del club es que no podrá jugar en toda la campaña
OWINGS MILLS -- El corredor de los Baltimore Ravens, J.K. Dobbins, se someterá a una resonancia magnética este domingo luego de sufrir una lesión en la rodilla izquierda el sábado por la noche, pero la expectativa es que se acabó su temporada, dijeron fuentes a Adam Schefter de ESPN.
Dobbins fue retirado del terreno de juego luego de quedar lastimado durante la serie inicial de la paliza de los Ravens por 37-3 sobre el Washington Football Team en FedEx Field. Un recluta de segunda ronda de hace un año, Dobbins estaba por comenzar su primera temporada como el corredor primario de Baltimore.
Si Dobbins queda descartado por el año, los dos corredores principales de los Ravens son Gus Edwards y Ty'Son Williams. Edwards es uno de los suplentes más subvalorados de la liga, promediando 5.2 yardas por acarreo a lo largo de las últimas tres temporadas (tercero mejor entre corredores). Williams, quien no fue reclutado saliendo de BYU el año pasado, ha impresionado a los Ravens este verano con un estilo de correr físico, acumulando 131 yardas en 24 acarreos en la pretemporada (5.5 yardas por acarreo).
Los Ravens tienen confianza en Edwards, quien firmó una extensión de dos temporadas y 10 millones de dólares en el receso de campaña, y que ha mostrado que puede ser titular si se le requiere. En el 2018, Edwards tomó las riendas como el corredor principal de los Ravens a media temporada y ayudó a Baltimore a llegar a los playoffs. Promedió 93.4 yardas terrestres y anotó dos touchdowns en los seis partidos de aquella campaña.
Los Ravens poseen el mejor ataque terrestre de la NFL del último par de temporadas, en parte por el sistema que ha instalado alrededor del quarterback Lamar Jackson, quien sumó 2,211 yardas terrestres combinadas entre el 2019 y 2020 para liderar al equipo. A lo largo de ese periodo, tres corredores han sumado más de 800 yardas: Edwards, Dobbins y Mark Ingram II.
En este receso de campaña, los Ravens exploraron la posibilidad de sumar a un corredor veterano por cuestiones de profundidad. El agente libre Todd Gurley II visitó a los Ravens en junio, pero no obtuvo oferta de contrato. No está claro si los problemas de rodilla de Gurley le permitirían aguantar una campaña completa.
Gurley estuvo entre aquellos que desearon a Dobbins una pronta recepción después de su lesión, vía redes sociales.
Dobbins, de 22 años de edad, esperaba una temporada de destape en el 2021. La campaña pasada, promedió 6.0 yardas por acarreo, el segundo promedio más alto para un corredor novato en los últimos 20 años, de acuerdo a ESPN Stats & Information. Solamente Alvin Kamara de los New Orleans Saints (6.1) tuvo un promedio mayor, como novato.
La lesión de Dobbins fue el más reciente contratiempo en un verano complicado para Baltimore. Por lesiones, los tres receptores abiertos de Baltimore se han perdido una porción del campamento de entrenamiento, y la línea ofensiva titular proyectada no entrenó junta por primera ocasión hasta la semana pasada. El receptor abierto Rashod Bateman, un recluta de primera ronda, se sometió a una cirugía en la ingle el 13 de agosto, y se podría perder el inicio de la temporada regular.
Ahora, la expectativa es que Dobbins se perderá la campaña del 2021, que es el resultado que muchos jugadores de los Ravens temían desde el sábado por la noche.
"Esa duele, hermano, porque sabes cuánto trabajo ha invertido y la clase de chico que es", dijo el receptor abierto de los Ravens, James Proche II, al término del duelo del sábado. "Ama el juego, Siempre que se le retira el juego a alguien así, realmente lo siente por él".