Fue un final con polémica en el Nuevao Gasómetro. Rubén Darío Insúa no quedó conforme con el partido ante Boca Juniors, que terminó empatado 1-1. El técnico de San Lorenzo, si bien no quiso entrar en polémica, aseguró que su jugador estaba habilitado en la jugada del final que pudo darle el triunfo en el cierre de la duodécima fecha de la Copa de la Liga.
Era un clásico importante para ambos equipos, ya que necesitaban sumar de a tres para afianzar su posición en la Tabla Anual y buscar la clasificación a la próxima edición de la CONMEBOL Libertadores. Y San Lorenzo debió conformarse con un punto al no poder ganarle al Xeneize, que el sábado previo cayó en la final de la Libertadores, con Fluminense en Brasil.
Al cumplirse los 90 minutos de juego, Augusto Batalla lanzó un pelotazo largo y la recibió Federico Girotti, quien la bajó y la jugada siguió, para definirla perfecta Nahuel Barrios y marcar el posible 2-1. Pero el árbitro, Pablo Echavarría fue al chequeo del VAR y allí Jorge Baliño marcó posición adelantada de Girotti.
“Cuando la pelota sale del pie de Batalla, Girotti estaba perfectamente habilitado y el gol era válido. La culpa no es del árbitro, es del VAR”, afirmó Insúa, molesto con la decisión tomada, pero a la vez respetuoso y aclarando que no quería quejarse más de la cuenta.
"Si hubiesen convalidado el gol, estaríamos en zona de clasificación a la próximo Libertadores. En Europa llevan cuatro años usando el VAR, pero en Argentina recién dos. Son cosas que irán mejorando, esperemos", agregó.
"El árbitro me dijo que había cobrado el gol, pero el VAR lo llamó y se lo anuló por medio centímetro (risas)... No, por el hombro, pero bueno. El árbitro no es el culpable. En el VAR hay que ser preciso al ciento por ciento. Pero ya está, el partido terminó y no podemos cambiar ahora el resultado", expresó Insúa.
"No es mala fe, a veces son rachas. No creo que nos perjudicaron", remarcó. Sin dudas, se quedó en la puerta de otro triunfo sobre Boca, pero no pudo cortar la racha en este torneo, sumando ahora 11 fechas sin ganar.