Tras la suspensión por una agresión del clásico entre Tigre y Chacarita, por los 32avos. de final de la Copa Argentina, Fernando Brandán, víctima de un botellazo lanzado desde una tribuna, le contó a ESPN Fútbol 12 cuál es su estado actual y sus sensaciones por lo ocurrido.
Ariel Penel, el juez del encuentro, tomó la decisión de interrumpir el duelo después de la agresión provocada por un hincha de Tigre, ya que le impactó con una botella llena en la cara del jugador funebrero debajo del ojo derecho. A los seis minutos del segundo tiempo, la doctora de Chacarita corroboró la lesión y le dijo al árbitro que así no podía seguir jugando.
Mediante un audio de whatsapp, Brandán rompió el silencio sobre la agresión sufrida: "Estoy bastante molesto, dolorido de la cabeza. La verdad es que pasé una mala noche".
"Acabo de recibir la información de que tengo una inflamación en la pupila, necesito varios de reposo, tengo que estar con control oftalmológico", detalló sobre la herida que le causó la botella en la cara.
Y lamentó que se quedará "con muchas ganas de jugar el domingo", pero principalmente, porque se duda sobre si fingió el golpe: "Es muy triste por lo que se está diciendo de mí, por los valores inmenso que tengo hacia el deporte que amo, me duele en el alma".
Por otro lado, el mediocampista agradeció "los mensajes de apoyo y que repudian los hechos de violencia".
"Ojalá que esto no vuelva a pasar, que pueda estar lo más pronto dentro de la cancha junto a mis compañeros, y poder terminar ese partido, que hoy en día es lo último que tendría que importar", concluyó.
El simpatizante de Tigre, ubicado en la platea, fue después detenido por la Policía. El Comité de Disciplina de la AFA decidirá si habrá continuación de este cruce por la Copa Argentina o bien darle por ganado el duelo a Chacarita.