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Una certeza y dos interrogantes para Gustavo Costas en la formación de Racing ante Estudiantes

Después del triunfazo por 1-0 sobre Boca en La Bombonera, que le dio el pasaje a la final del Torneo Clausura de la Liga Profesional, Racing Club vive horas de decisiones. El sábado 13 de diciembre, desde las 21.00 en el Estadio Madre de Ciudades de Santiago del Estero, la Academia buscará el título ante Estudiantes. Pero la semana arrancó con una certeza y dos interrogantes que Gustavo Costas deberá resolver.

El regreso de dos piezas clave para Racing

La buena noticia para Racing es el retorno de Santiago Sosa y Gastón Martirena, expulsados en el triunfo por penales ante Tigre y ya con la fecha de suspensión cumplida. El capitán es una fija: volverá al mediocampo y será el eje de un equipo que encontró personalidad en los momentos más difíciles del torneo.

Pero la situación de Martirena no es tan lineal. El lateral uruguayo recupera su lugar en la lista, aunque su presencia entre los titulares no está asegurada. Y ahí aparece la primera gran duda de Costas para la final.

¿Martirena o Mura? La banda derecha, un dilema real para Costas

El nivel de Facundo Mura ante Boca abrió un debate puertas adentro. El defensor jugó uno de sus mejores partidos del semestre justo cuando atraviesa sus últimos días en el club, ya que no renovará su contrato y quedará libre a fin de año. Sin embargo, su actuación sólida y su fiabilidad defensiva lo reposicionaron en la consideración del entrenador.

Martirena, por su parte, venía de intervenciones decisivas: fue clave con el agónico gol ante River en octavos y tuvo un rendimiento sólido frente a Tigre. Ese antecedente lo sostiene y le da argumentos para pelear el puesto.

La pregunta, todavía sin respuesta, es directa: ¿Premiar el presente inmediato de Mura o volver a confiar en Martirena, el lateral que sostuvo el tramo más caliente del torneo? Costas no dio señales, y la puja se instala como el gran punto a resolver.

El caso Santiago Solari: juega, pero... ¿Cómo llega?

La otra duda pasa por Santiago Solari. El extremo sufrió un leve desgarro en el alargue de los cuartos ante Tigre y llegó al límite al cruce con Boca. Jugó 82 minutos con un vendaje y tuvo que pedir el cambio en la segunda mitad.

Todo indica que hará lo imposible para estar en la final, y en el cuerpo técnico nadie imagina un equipo sin él. Sin embargo, la semana será clave para medir cargas y determinar si podrá sostener el partido completo en un duelo decisivo que se perfila intenso y físico.