A lo largo de su carrera, Diego Armando Maradona vivió momentos inolvidables. Y otros que lo tuvieron como protagonista por situaciones polémicas.
Aquí, un repaso por sus momentos más conflictivos:
UNA ETERNA RIVALIDAD
La final del Mundial de 1990 no fue una más en la carrera de Maradona. Argentina venía de eliminar a Italia, local y favorito, en semifinales, y la gente quería ver al 10 derrotado y de rodillas. Cuando se entonaba el himno argentino, desde las tribunas del Olímpico de Roma bajó una estruendosa silbatina. El 10, lejos de quedarse callado, miró desafiante a la multitud y respondió con un insulto: “Hijos de puta, hijos de puta”, se leyó en los labios de Pelusa. Una polémica más de las tantas originadas desde que Maradona llegó a Nápoles, la humilde ciudad del Sur de Italia, para hacerla brillar con títulos y conquistas, marcando un antes y un después ante los ricos del Norte.
EL PRIMER CASO DE DOPING
Los casos de doping iban a perseguir a Maradona a lo largo de su carrera. El 17 de marzo de 1991 luego de un encuentro por la Serie A entre Nápoli y Bari, el 10 dio positivo en el control antidopaje post partido. La sustancia encontrada fue cocaína. Tras ese caso, recibió una sanción de 15 meses sin jugar al fútbol de manera profesional. Fue la despedida del fútbol italiano y de Nápoli. Luego pasaría a jugar a Sevilla, con Carlos Bilardo nuevamente como entrenador.
EL RIFLE Y LOS PERIODISTAS
En la previa al Mundial de Estados Unidos de 1994, Maradona buscó una quinta apartada del ruido para concentrarse de la mejor forma, en las afueras de la ciudad de Buenos Aires. Pero se sabe, el 10 y la prensa tenían una especie de imán que siempre los atraía. Aún cuando Maradona buscaba paz y tranquilidad. Los periodistas le siguieron el rastro y buscaron sacar imágenes del interior del lugar. Maradona no toleró ese acoso y les disparó a los medios apostados allí con un rifle de aire comprimido. Hubo varios lesionados y un nuevo escándalo: el jugador debió indemnizar a las personas afectadas.
DOPING MUNDIALISTA
El Mundial de Estados Unidos de 1994 marco un quiebre en la carrera de Maradona. Con un equipo que parecía ser el favorito por el nivel mostrado en los primeros partidos, la noticia del doping de Diego por efedrina, y una nueva suspensión, marcó el fin del conjunto de Basile de ese certamen. Y a despedida de Maradona de la albiceleste. La imagen del 10 saliendo de la cancha tras el partido ante Nigeria, acompañado por una asistente de la FIFA rumbo a los vestuarios, quedó como un triste recuerdo para los argentinos. Fue el Mundial en el que Maradona patentó una de sus tantas frases: “Me cortaron las piernas”.
EL CRUCE CON TORESANI
El 7 de octubre de 1995 Boca se medía con Colón en La Bombonera. Julio César Toresani, aguerrido volante del sabalero, se iba expulsado tras un cruce con Maradona. Y en el vestuario, caliente, decía: “A mí me echó Maradona. Que diga lo que quiera cuando me escuche, me importa un carajo. Quisiera tenerlo en frente a ver si me dice las cosas como en el partido. Yo me la banco, lo iría a buscar hasta la casa”, dijo el Huevo. Como era de esperarse, Diego no se quedó atrás: “A Toresani le dije en la cancha que yo vivo en Segurola y Habana 4310, séptimo piso. No tengo ningún problema en que me venga a buscar porque estoy cansado de estos que se van de pico. Lo espero en Segurola y Habana 4310, séptimo piso y vamos a ver si me dura treinta segundos”.
LAS INTERMINABLES PELEAS CON PELÉ
Pelé, otro de los grandes genios del fútbol mundial, vivió momentos de buenos y malos con el 10. Maradona nunca se quedaba callado ante las declaraciones de O Rey que de alguna forma podían involucrarlo en la pelea eterna por quién fue el mejor de la historia. “Yo nací para el fútbol como Beethoven nació para la música y Miguel Ángel nació para pintar”, declaró Pelé. “¡Beethoven! Jamás se escuchó Beethoven en una cancha. ¿La verdad? Le cambiaron el frasco”. Años antes, el argentino había encendido las polémicas con el brasileño, al señalar: “Pelé debutó con un pibe”.
EL ENOJO CON RIQUELME
Cuando era entrenador de la Selección, Maradona se peleó con uno de los grandes ídolos de Boca, el 10 que lo sucedió cuando dejó el fútbol: Juan Román Riquelme. La frase que disparó el enfrentamiento fue la siguiente: “Yo lo quiero de enganche, en los últimos veinte metros para marcar diferencia, con velocidad mental para habilitar a los delanteros y que llegue al gol, pero el otro día lo vi en la cancha de Boca y no sé si tiene problemas físicos o qué, pero así no me sirve”. Román no lo perdonó y desde ese momento la relación se rompió. “Me enteré por la tele que el entrenador me ve muy mal. La realidad es que con el técnico del seleccionado argentino no coincidimos mucho, mis códigos no son los de él y nosotros dos está claro que no podemos trabajar juntos”, respondió Riquelme.
LA RELACIÓN CON COPPOLA
Guillermo Coppola formó parte de la vida del 10 durante muchos años, como amigo y representante. Pero la relación se rompió cuando Maradona lo acusó de “quedarse con el dinero de sus hijas”. Y agregó: “De la noche a la mañana me quedé sin plata. Lo que más me duele es la traición”. Fueron varios años de peleas mediáticas, hasta que después de un tiempo, en 2019, se reencontraron. Juntos, en 1996, vivieron momentos difíciles cuando Coppola fue detenido en el penal de Dolores por supuesto tráfico de droga, en una causa donde el propio Maradona estaba siendo investigado. Finalmente, se comprobó que la causa estaba armada y el juez terminó siendo detenido.
OTRO ENOJO CON LA PRENSA
Luego de unas duras Eliminatorias y una sufrida clasificación al Mundial de Sudáfrica 2010, Maradona festejó el pasaje a la Copa del Mundo, que esta vez, lo iba a tener en el banco como entrenador de la Selección argentina. Fiel a su estilo, tras asegurarse el boleto, disparó contra la prensa en plena conferencia de prensa. “Al que no creía, a los que no creyeron, con el perdón de las damas, que la chupen, que la sigan chupando. Yo soy blanco o negro, gris no voy a ser nunca en mi vida. Ustedes me trataron como me trataron. Sigan mamando. Ahora otra pregunta”, dijo sin anestesia.
MACRI, EL CARTONERO
A finales de 1995 Mauricio Macri ganó las elecciones y llegó a la presidencia de Boca Juniors. El empresario llegó con una política austera y firme sobre los contratos y las primas de los jugadores. Comenzó a renegociar algunos contratos y por supuesto, se enfrentó con Maradona. El 10 lanzó una de sus célebres frases, al comparar al millonario Macri con el cartonero Báez, supuesto testigo de la muerte de Alicia Muñiz a manos de su pareja de ese momento, el boxeador Carlos Monzón. Pasó de todo en ese tiempo: asumió Bilardo como DT de Boca, Maradona se retiró y volvió con el Bambino Veira como DT. Con Macri, siguió la disputa hasta los últimos días, incluso cuando el presidente xeneize pasó a ser el presidente de la Nación.