BARCELONA -- Leo Messi celebró su partido 674 con el Barça, el que le igualaba con Iniesta y ya sólo lo deja detrás de Xavi Hernández, con una soberbia exhibición en Sevilla. Una actuación con sabor a campeonato.
Marcó dos goles que rompieron cualquier esperanza del Betis y, al dirigir al líder a una autopista sin peaje, mostró que como director de un equipo coral no tiene rival y cerró la noche con un gol descomunal y con un hat trick de campeonato que la propia hinchada del Betis premió con sus aplausos.
“No recuerdo que me pasara antes. Agradezco la respuesta de la gente, porque, aunque el Betis es rival, siempre nos tratan bien en este estadio”, afirmó Messi a pie de campo al acabar el choque, con el semblante feliz y totalmente entregado al equipo desde el primer momento y hasta el último.
Con el Betis achuchando, al principio, Messi aprovechó la falta forzada por Arthur para anotar el 0-1 con un extraordinario lanzamiento directo al que Pau López no pudo responder.
Con el primer tiempo por terminar, con las espadas aún en alto, el argentino no desaprovechó la asistencia de Luis Suárez para anotar un 0-2 con sabor a definitivo en la suerte del partido.
“Es una victoria muy importante, porque después del resultado de ayer (derrota del Atlético de Madrid), no podíamos fallar y teníamos que sacar la victoria para aumentar la ventaja”, resaltó el capitán azulgrana, quien sin disimulo, aplaudió el planteamiento de Ernesto Valverde para desarbolar al Betis.
“El mister leyó muy bien el partido. Perfecto”, aseguró el delantero, al advertir de la personalidad del Betis. “Jugamos contra un equipo que trata muy bien la pelota, que la juega muy bien con los medios y nunca sufrimos. Supimos estar cómodos sin la pelota".
Messi destacó así la virtud de “adaptarse a todas las formas de jugar” del equipo azulgrana y disfrutó, se podría decir, como un niño ante la rendición del rival y, al final, del propio público local, que coreó su nombre con sinceridad, rendido a la exhibición con que cerró la noche, un hat trick maravilloso para acompañar a otro gol magnífico de su socio uruguayo, Suárez.
Messi. Leo. El capitán. El líder del líder, ya suma 51 hat tricks en su carrera con el Barça, 33 este curso en la Liga y con 29 goles en 26 partidos del torneo regular, ya roza los 40 en partidos oficiales.
Con esas cifras se explica todo y todo se entiende.
“¿Está finiquitada la Liga?”, se le preguntó a Messi, quien respondió con la sonrisa y cautela de las que siempre ha hecho gala.
“Dependemos de nosotros mismos. No hay nada definido, porque peores cosas se han visto”, contestó con alma y sentenció, “Hay que seguir jugando sin regalar nada”.
El Barça no regaló nada, pero sí regaló a su afición una victoria de oro y no podía ser otro que Messi, Leo Messi, quien liderase el triunfo con un hat trick de campeonato. De auténtico campeonato.