SANTIAGO -- Sin mayor autocrítica y análisis se mostró Aníbal Mosa, presidente de Blanco & Negro, tras los hechos de violencia que realizaron hinchas de Colo Colo y Santiago Wanderers en el Bicentenario Elías Figueroa.
Al momento de hablar con los medios, el dirigente exhibía una sonrisa notoria, con la que manifestó que "lo importante era obtener la estrella 31 (...) El único punto medio negro fue no poder jugar el partido para recibir la copa con nuestra gente".
Cuando se le consulto sobre los desmanes, el timonel de Colo Colo sólo expresó que "tiene que hacerse cargo la ANFP, los clubes, la autoridad, el gobierno. La situación de hoy es muy grave. Se podría haber solucionado con el ingreso de Carabineros. Me imagino que estas imágenes están recorriendo el mundo".
Por último, el mandamás de la concesionaria se refirió a los desafíos venideros, especialmente en cuanto a refuerzos. "Vamos a ir a celebrar en la noche. A contar de mañana veremos lo que haremos el 2016", cerró.