Atlético Nacional empezó un año con pocas esperanzas por parte de sus aficionados pues había mucha desilusión por las últimas decisiones de la junta directiva, por los pocos refuerzos que llegaban al equipo y por un técnico nuevo que ya había fracasado en un periodo anterior.
La llegada de Paulo Autuori nunca convenció y eso llevó a un distanciamiento por parte de los hinchas, quienes se empezaron a alejar, asistiendo en un bajo promedio al estadio Atanasio Girardot.
A pesar de esa situación, el año empezó con alegría: Nacional celebró la Superliga ante Deportivo Pereira en una agónica definición en la que Tomás Ángel fue héroe y marcó dos goles en el Atanasio.
En el primer semestre del año, la escuadra antioqueña tendría como objetivo la participación en el Torneo Apertura de la Liga colombiana, con la obligación de meterse en los cuadrangulares y la fase de grupos de la CONMEBOL Libertadores.
El elenco paisa tuvo un buen rendimiento en ambas competencias, con buenos resultados, pero con un fútbol que seguía sin convencer a los aficionados y a los periodistas especializados que lanzaban fuertes críticas por el trabajo del entrenador brasileño.
El cuadro verdolaga cerró la fase del todos contra todos en la tercera casilla de la tabla de posiciones con 39 puntos, producto de nueve victorias, ocho empates y tres derrotas, clasificándose para los cuadrangulares semifinales.
En esta ronda compartió grupo con Alianza Petrolera, Deportivo Pasto y Águilas Doradas. Terminó primero del Grupo A con 12 puntos y se clasificó a la final del campeonato en donde se enfrentó a Millonarios.
El equipo verde no llegaba en igualdad de condiciones pues el Embajador había hecho un mejor torneo, demostrando un fútbol con muchas variantes y que enamoraba a hinchas y periodistas, que en cada fecha elogiaban el gran trabajo del técnico Alberto Gamero.
Nacional inició la final con un empate 0-0 en el juego de ida disputado en el estadio Atanasio Girardot, con una presentación bastante irregular. Para el choque de vuelta empezó ganando el partido con anotación de Jefferson Duque y por varios minutos fue campeón del torneo.
Sin embargo, Paulo Autuori hizo varios cambios que llevaron al equipo a defenderse muy cerca de su arquero Kevin Mier, lo que terminó con el empate de Millonarios y con la definición del título desde el punto penal.
En esa instancia, la escuadra bogotana fue más efectiva y se quedó con la estrella de primer semestre tras los fallos de Dorlan Pabón y Jarlan Barrera, este último con un cobro que todavía es tema de debate.
Nacional siguió su camino por la CONMEBOL Libertadores en donde no tuvo una muy buena presentación, pero terminó clasificando a los octavos de final tras terminar ubicado en la segunda casilla del Grupo H con 10 puntos.
Para la siguiente ronda del campeonato, la escuadra antioqueña se había quedado sin entrenador pues el brasileño Paulo Autuori dejó al equipo antes de que empezara el Torneo Finalización.
Ante la salida del estratega, llegó William Amaral, quien fue su asistente técnico, para tomar las riendas del elenco verde y conducirlo en una fase que ilusionó a los hinchas pero que terminó con otra eliminación.
El conjunto paisa venció a Racing de Argentina 4-2 en el estadio Atanasio Girardot, pero en la vuelta perdió por goleada 3-0, con una actuación desafortunada.
Para el segundo semestre del año llegaron nuevos objetivos, entre ellos la Copa Colombia, torneo en donde es el equipo con más títulos. Nacional siempre compite en este campeonato pues da un cupo a la CONMEBOL Libertadores.
Por esta razón, el equipo alcanzó la final dejando en la semifinal a un Deportivo Pereira que lo tuvo entre las cuerdas, pero que le dio vida y lo terminó sufriendo desde el punto blanco del penal.
En la última fase del campeonato se volvería a enfrentar a Millonarios, equipo que había eliminado en semifinales al Cúcuta Deportivo. El Embajador otra vez llegaba como favorito y había pocas ilusiones en el cuadro de Medellín.
El primer duelo se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá en el estadio Nemesio Camacho El Campín con empate 1-1. La escuadra verde otra vez empezó ganando el partido, pero no tuvo restos al final del segundo tiempo y lo terminó igualando.
En la vuelta todo fue a favor de Millonarios que empezó ganando con anotación de Leonardo Castro y que tuvo para sellar la victoria en varios ataques que sus delanteros no lograron definir. Nacional se encontró con un tanto milagroso al final del partido y todo se definió desde los penales.
En esta instancia, el portero Kevin Mier fue la figura atajando uno de los cobros y dándole nuevamente un título de Copa Colombia al elenco paisa, que se clasificó para la fase previa de la Libertadores.
Este título fue el primer campeonato para el entrenador John Jairo Bodmer, quien tomó las riendas del equipo tras la salida de William Amaral que fue despedido tras la mala presentación en los octavos de la Libertadores y algunos malos resultados en el torneo local.
El técnico brasileño dirigió al equipo hasta la jornada 16 de la fase del todos contra todos cuando perdió como visitante 2-1 frente al Unión Magdalena.
El Torneo Finalización de la Liga colombiana también era una prioridad para Nacional que necesitaba buscar el título de Liga para congraciarse con su hinchada tras la derrota frente a Millonarios a mitad de año.
Por esta razón, la dirigencia tomó la decisión de cambiar de entrenador pues consideraron que con Amaral no iban a alcanzar las finales del torneo local. Así se dio la llegada de Bodmer que dirigió al equipo en los cuadrangulares semifinales.
Nacional clasificó ubicándose en la quinta posición en la tabla general con 33 puntos, producto de diez victorias, tres empates y siete derrotas. En la siguiente ronda hizo parte del Grupo B junto a Millonarios, América de Cali e Independiente Medellín.
El cuadrangular no fue lo que se esperaba y terminó tercero en su grupo con nueve puntos, tres derrotas, dos de ellas ante su clásico rival Medellín y menos cuatro goles en el gol de diferencia. Cerró la temporada con una victoria frente a Millonarios en El Campín.