Pese a la insistencia de Colo Colo por llegar al arco rival, el equipo de Gustavo Quinteros fue incapaz de doblegar a Deportivo Pereira y, tras empatar sin goles, nuevamente se quedó en la fase de grupos de la CONMEBOL Libertadores.
Este nuevo traspié internacional es parte de una mala racha que arrastra el Cacique desde hace más de 15 años, donde han terminado eliminados en siete oportunidades cuando estaban bajo la presión de sumar para clasificar en una fase grupal.
Lo más lamentable es que, de esas siete definiciones, seis de ellas fueron de local, con todo el apoyo de su gente en el Estadio Monumental.
Aquel paupérrimo registro solo fue superado en 2018, cuando agarraron vuelo y, adiestrados por Paulo Guede, alcanzaron los cuartos de final, siendo eliminados por Palmeiras.
Por otro lado, el no haber superado la fase de grupos significó un remezón en el tema económico, donde las arcas del club dejaron de ganar un millón 250 mil dólares.
Además de esto, la concesionaria de Blanco y Negro dejó escapar $300 mil de la divisa norteamericana, ya que la Conmebol entrega ese bono por cada partido ganado en la fase grupal.
Por ende, Colo Colo se va con otro balance negativo de la Libertadores, tras perder en lo deportivo y en lo material, con un poco más de un millón y medio de dólares, sin poder abrochar aquellos partidos de relevancia jugando en su estadio.