La actuación del golero Washington Aguerre, la solidez defensiva, el compromiso de todos los futbolistas, y el planteo de juego diseñado por Diego Aguirre, fueron los puntos determinantes para que Peñarol lograra la clasificación a las semifinales de la CONMEBOL Libertadores.
Aguerre fue el jugador determinante de la llave que disputaron los aurinegros contra Flamengo. En el juego de ida salvó su arco en varias oportunidades y en la revancha volvió a mostrar solidez.
Jugó con seriedad, alejado de las locuras y polémicas que lo rodean por su particular manera de sentir y vivir los colores. Aguerre se transformó en figura clave de este momento de Peñarol.
Espalda con espalda
La defensa de Peñarol mostró una solidez tremenda. Los cuatro integrantes del sector defensivo jugaron con la vieja premisa de estar espalda con espalda. Los dos centrales, Javier Méndez y Guzmán Rodríguez, aguantaron a pie firme todos los centros que lanzó Flamengo.
A Pedro Milans le tocó una dura tarea porque por su zona se volcó Gerson, el mejor jugador de Flamengo en la serie, pero al margen de sufrir, se las ingenió para defender. Maxi Olivera clausuró su zona y terminó anulando a Gonzalo Plata.
Entrega y Actitud
La actitud de los jugadores de Peñarol contrastó con la de sus colegas de Flamengo. Los carboneros jugaron con hambre de gloria. Fueron a cada pelota como si fuera la última, una actitud necesaria para este tipo de partidos que le permitió igualar la calidad de los futbolistas brasileños. Los hombres del mediocampo se entregaron por completo a la causa. Eduardo Darias fue el compañero ideal para Damián García. Ambos corrieron una enormidad ante un rival que los superó futbolísticamente.
Aprovechar la oportunidad
En ofensiva el equipo de Diego Aguirre no estuvo fino, y la realidad es que no generó nada y que su única aproximación al arco del Mengao fue tras un error del golero Rossi. Pero tuvo la virtud de aprovechar una de las pocas oportunidades que dispuso en el juego de ida donde anotó un gol que defendió en el CDS con uñas y dientes.
El planteo del DT
A nadie escapa la importancia que tiene el técnico Diego Aguirre en este momento de Peñarol. El entrenador llevó adelante un planteo que brindó sus frutos. Cedió terreno y pelota a Flamengo jugando con un 4-4-2 que por momentos fue 4-4-1-1. Aguirre tenía claro que la pelota la iban a tener los brasileños y que había que aprovechar la mínima oportunidad. ¿Sufrió? Sí. Pero defendió la ventaja obtenida en Río a pie firme. Fue un típico equipo uruguayo. Como los de antes.