Liga de Quito coronó la temporada 2024 con el título de campeón de la LigaPro, tras vencer a Independiente del Valle por 3-1 en el marcador global de las finales. Los albos consiguieron su título 13, en un año complejo en distintos aspectos.
El Albo corrigió los errores cometidos en el primer semestre para consolidar su trabajo colectivo en el segundo y coronarse bicampeón del fútbol ecuatoriano.
La Primera Fase de LigaPro los albos sumaron 30 puntos, cinco menos que IDV que ganó la etapa. En ese primer semestre además los albos perdieron la Recopa Sudamericana y quedaron fuera de la CONMEBOL Libertadores.
La llegada del entrenador Pablo ‘Vitamina’ Sánchez en reemplazo de Josep Alcázar fue una de las claves de esta corrección de errores. “Encontré un equipo golpeado”, dijo hace dos semanas el entrenador argentino que, además de trabajar en lo táctico, recuperó a sus jugadores en lo emocional, dio oportunidad a los juveniles y repotenció a otros.
Marcó un libreto táctico 4-3-2-1 donde el aporte goleador de Alex Arce fue clave. El paraguayo le dio al club 28 goles en LigaPro y 35 en la temporada. Pero el trabajo colectivo tuvo un mayor peso para este título de los albos.
La defensa con José ‘Choclo’ Quintero, Ricardo Adé, Richar Mina y Leonel Quiñónez fue cada vez más solvente. Junto con el arquero Alexander Domíguez, sacaron 9 partidos con la portería en 0 en las 15 fechas de la Fase 2 y en la primera final. Quintero perdió la titularidad en los seis partidos finales por una lesión, su reemplazante fue Daniel de La Cruz, un jugador de 20 años, que no le defraudó al DT.
El hijo del histórico Ulises de la Cruz marcó, proyectó y estuvo muy cerca de marcar su primer gol a nivel profesional. Hubo confianza en su trabajo del entrenador y hubo compromiso del jugador con el club.
El medio campo se consolidó en los dos últimos meses del torneo. Ezequiel Piovi, Fernando Cornejo y Gabriel Villamil, una trilogía, que no solo se quedó en la recuperación de balón. Los tres celebraron goles en el segundo semestre.
Y en ofensiva, ‘Vitamina’ Sánchez confió en el joven Bryan Ramírez, un jugador comodín que jugaba como lateral por izquierda, en el medio campo y finalmente lo ubicó como extremo por derecha. Le quitó la titularidad a Lisandro Alzugaray y se convirtió en el mejor socio de Arce: le entregó 8 pases goles.
‘Vitamina’ también provocó la levantada de Jhojan Julio, otro asistidor de Arce, y también ofensivo con gol. Fue fundamental en las dos finales y que tal vez serían sus últimos partidos con los albos, pues existen varias propuestas por sus derechos deportivos.
Con el equipo funcionando como una máquina de fútbol y goles, Liga de Quito consolidó una campaña rumbo al título. Marcó 63 goles en los 30 partidos de las Fases 1 y 2, y en las dos finales. Recibió 32 goles, y se transformó en el mejor equipo de la temporada.
El DT argentino también contó con una banca para los recambios que le dieron alternativas importantes como el rendimiento de Madison Julio, que tuvo mayores oportunidades después de recuperarse de una lesión y de la salida Oscar Zambrano al fútbol de Inglaterra.
Lisando Alzugaray fue el recambio indispensable en cada partido, y Michael Estrada, que pese a no convertir los goles que se esperaban de él, fue un compañero para el trabajo ofensivo de Alex Arce.
‘Vitamina’ también le dio minutos en primera a Juan Sebastián Rodríguez, un volante de 18 años, de quién se proyecta a ser un volante de primera línea con grandes condiciones técnicas.
Liga de Quito tendrá unos días de celebración y luego, el equipo empezará a preparar la temporada 2025 donde deberá jugar la LigaPro, CONMEBOL Libertadores, la Supercopa Ecuador y la Copa Ecuador.