BARCELONA -- El el VAR corrigió al árbitro en el 0-1 del Barcelona rozándose el descanso, y el VAR volvió a corregirle en el 1-1 que no fue acercándose al final. El líder, que habría podido perder de no existir el VAR, ganó un partido indispensable gracias a él... Porque Gil Manzano anuló el remate de Raphinha primero y dio validez al de Iñaki Williams después para tener que corregirse a si mismo.
Y todo ello en plena tormenta, con el club azulgrana en el disparadero y descubriendo en Bilbao un desprecio no recordado por parte de la afición. El caso Negreira, que todavía ni fue admitido a trámite por un juez, ya ha sido juzgado en las redes sociales, en no pocos medios de comunicación y por el mundo del fútbol en general.
Y el Barça es a ojos de todo el mundo culpable. Sin saberse qué pasó ni adonde fueron a parar esos 7.3 millones de euros que durante casi 18 años le pagó al que fuera vicepresidente del Comité Técnico de Arbitros, el club azulgrana ya carga con el peso de ser considerado un club que compró a los árbitros durante tantos años que sus éxitos, brillantes o no, los han puesto en entredicho.
Mientras el club azulgrana prepara una respuesta y defensa pública por el caso, el equipo de Xavi va descubriendo lejos del Camp Nou que no es bien recibido. "Nosotros ganamos la Liga 2017-18 con 14 puntos de ventaja sobre el segundo y la final de Copa al Sevilla por 5-0... Me parece que ayudas no hubo ninguna", respondió Ernesto Valverde, hoy técnico del Athletic y en aquella época del Barça.
"Siempre he recibieron muy bien aquí y fui muy bien tratado... Y por eso me ha sorprendido y también entristecido los gritos que la afición nos ha dedicado", reconoció Xavi, alucinado al escuchar gritos de 'a Segunda a Segunda' de dicados al Barça, además de insultos mucho más gruesos.
"Se está juzgando al Barça antes de tiempo y es algo que me entristece", solventó Xavi, visiblemente incómodo ante lo vivido... Y temeroso que vaya a repetirse en los próximos partidos de su equipo como visitante.
Y la casualidad quiso, por si fuera poco, que en plena tormenta el equipo azulgrana ganase como ganó, por medio del VAR, con justicia pero con polémica. Y admitiendo, también, que este partido, tres años antes, sin la existencia de este VAR, lo habría perdido...