BARCELONA -- El Barcelona tiene prácticamente cerrado un acuerdo con el West Ham para el traspaso de Marlon Santos, central brasileño que jugó esta temporada cedido en el Niza y por quien ingresará, de acuerdo con fuentes cercanas a la negociación, cerca de 23 millones de dólares, en lo que se entiende, al menos desde un punto de vista económico, como un excelente negocio atendiendo a que su fichaje le costó al club 5.7 millones de dólares hace un año.
Centrado el foco en la salida de futbolistas de la plantilla azulgrana que no entran en los planes del técnico Ernesto Valverde, con el interés del Betis en Denis Suárez y Paco Alcácer o pendiente de solucionar los casos de André Gomes, Yerry Mina y otros cedidos sin sitio en la plantilla, con Marlon existía cierta tranquilidad, atendiendo a que mantenía por contrato una temporada más de cesión con el Niza.
Sin embargo, el pacto entre ambos especificaba que en caso de recibir una propuesta de un tercer club, el Niza tendría la potestad de igualar la oferta y el presidente Jean-Pierre Rivère desveló la existencia de un interés “que no podemos igualar”, dando por hecha la pérdida del jugador, quien completó una campaña más que aceptable a las órdenes de Lucien Favre.
El agente de Marlon, Fred Moraes, llevó personalmente y con la colaboración de Giuliano Bertlucci, las negociaciones junto al CEO del Barça, Òscar Grau, con los dirigentes del West Ham, que contando con el beneplácito de su nuevo entrenador Manuel Pellegrini alcanzaron este martes un principio de acuerdo para el fichaje del brasileño.
El club londinense pagaría un fijo cercano a los 20.7 millones de dólares que aumentaría hasta los 23 en variables. Faltaría por concretar el interés del Barça en mantener una opción de recompra durante los tres primeros años (el jugador firmará un contrato de cinco temporadas) y, también, un derecho de cobrar un tanto por ciento no especificado en caso de un traspaso a otro club por parte del West Ham.
Marlon Santos, que cumplirá 23 años en julio, se incorporó cedido desde el Fluminense al Barça en el verano de 2016, incorporándose al Barça B y llegando a debutar en el primer equipo, a las órdenes de Luis Enrique con una buena prestancia en los dos partidos que jugó y que motivaron que el club decidiera hacer efectivo su fichaje, por 5.7 millones de dólares.
Sin embargo, al acabar la pasada campaña el club decidió cederle al Niza por dos temporadas, jugando un total de 26 partidos (24 de ellos oficiales) a buen nivel y sin ser tenido en cuenta tras la marcha de Mascherano, cuando el Barça decidió el fichaje de Yerry Mina.
Su buen desempeño fue suficiente, sin embargo, como para que su nombre fuera relacionado con la Premier League. Se especuló con un interés del Leicester, como heredero del alemán Robert Huth y también apareció el West Ham, al que se relacionó con Yerry Mina.
Finalmente, su adaptación ya solvente al fútbol europeo le llevó a ser elegido por el equipo del Chicharito Hernández.