BARCELONA -- Ernesto Valverde medita apostar en San Mamés por la titularidad de Boateng, dando descanso a Luis Suárez después de que el delantero uruguayo acabase con un cansancio evidente el Clásico de Copa tras enlazar cuatro partidos completos en once días.
Solo la duda que se mantiene con Lionel Messi, no recuperado totalmente de la contractura que sufrió en el aductor frente al Valencia, podría variar los planes de Valverde. El argentino jugó la última media hora ante el Real Madrid y dio buenos síntomas... Pero la prudencia entre los médicos es absoluta y hasta última hora del sábado, o incluso el mismo domingo, no se sabrá con certeza si el capitán estará en plenitud.
Kevin Prince Boateng, fichaje sorpresa del Barcelona en el mercado de invierno, debutó a toda prisa en el partido de ida de los cuartos de final del torneo del KO en Sevilla, habiendo completado solamente un entrenamiento con sus nuevos compañeros y mostrando muchas lagunas tácticas, desconocimiento, respecto a los automatismos que se le conocen al equipo azulgrana.
Dos semanas y media después de su llegada el delantero ghanés ya está en mejor disposición y Valverde, entendiendo la importancia de Suárez en sus planes ante los partidos vitales que se avecinan en el calendario, contempla la opción de dar descanso al uruguayo en Bilbao... Y también en el siguiente encuentro, una semana después frente al Valladolid en el Camp Nou.
Suárez admitió en voz alta la necesidad de empezar a reservarse ante la carga de partidos y mostró su disposición a gozar esta temporada de mayor descanso que en años anteriores pendiente de su rodilla. Sin embargo solo se ha perdido uno de los 12 últimos encuentros y suma 30 apariciones en los 36 partidos que lleva el Barça este curso, 27 como titular y 24 completos, rozando los 2 mil 500 minutos y provocando cierta preocupación entre los técnicos.
El entrenador azulgrana, cuyo discurso fue muy claro al presentar a Boateng como un recurso llamado a dar descanso a su goleador indiscutible, no es amigo de hacer grandes variaciones en sus planes pero entiende, junto a su equipo de colaboradores más próximos, la necesidad de tener a Suárez en plenitud ante el momento cumbre de la temporada que se avecina.
En paralelo al ‘9’, la necesidad de pausar a Messi tiene la misma consideración entre los técnicos. El capitán apostó, en acuerdo con Valverde, reservarse en el Clásico y jugar en modo prueba la última media hora. Las sensaciones fueron buenas, no arrastró dolor y se mostró en buena condición física... Pero la cautela ante el calendario que se le avecina al Barça es máxima entre los preparadores y médicos.
A TOPE
Visitando este domingo al Athletic en San Mamés, la plantilla dispondrá por fin de una semana limpia de partidos hasta recibir al Valladolid antes de enlazar cuatro encuentros de máxima intensidad y vitales entre el 19 de febrero y el 2 de marzo, abriendo la eliminatoria de Champions frente al Olympique de Lyon y cerrando con la visita liguera al Real Madrid.
Entre ambos habrá visitado también, con 4 días de diferencia, a Sevilla en Liga y el Bernabéu con la final de Copa en el plano y en todos esos encuentros la presencia de Suárez y Messi se estima poco menos que indiscutible, por lo que los técnicos meditan dar una pausa de competición para enfocar ese momento en plenitud de condiciones.
Valverde no se plantearía en Bilbao reservar a los dos jugadores a la vez pero í sería posible que uno de los dos tuviera descanso, entrando Boateng en la quiniela por el uruguayo y esperándose la puesta a punto de Dembélé, ya recuperado de su lesión, como posible sustituto del argentino. O de Coutinho si Leo jugase en San Mamés.