BARCELONA -- El Barcelona confía en cerrar la incorporación de Matthijs de Ligt, considerado en el club un fichaje estratégico en el futuro del equipo, y espera que todo el trabajo de campo realizado en los últimos meses, con dos reuniones últimas en Mónaco y Amsterdam (ésta desvelada por Mundo Deportivo) sirva para convencer al jugador, tanto desde un punto de vista deportivo como, también, económico, de acuerdo con fuentes cercanas a la negociación.
Aunque la entente entre Barça y Ajax se considera un hecho, con un traspaso cifrado en 89,5 millones de dólares, al club azulgrana le falta convencer a De Ligt, incómodo con la posibilidad de verse relegado a un segundo plano por la competencia que hay en el puesto en la plantilla azulgrana y exigente a unas mejores condiciones económicas, más acorde con lo que le ofrecerían otros clubes.
El central ha mantenido en todo momento al Barça en el primer lugar de sus preferencias, pero aconsejado por Mino Raiola (interesado igualmente en sacar mejor rendimiento financiero en su comisión) quiere hacerse valer y de ahí que pidiera al club azulgrana un salario no inferior al pactado con Frenkie de Jong, un asunto que se habría abordado y solventado presentándole un contrato con un montante total en cuanto al salario pero con importes ascendentes cada temporada. Además, claro, de unas primas extras, condicionadas a los títulos logrados, unas cláusulas que tienen todos los jugadores de la plantilla y con unas condiciones individuales.
Esperando a su despedida oficial del Ajax, futbolísticamente este miércoles con el cierre de la Liga holandesa, el Barça entiende que los próximos días deben ser “definitivos”, según explicó a ESPN Digital una fuente del club azulgrana, que no descartó la posibilidad, llegado el caso, de presentar juntos a De Ligt y De Jong, una circunstancia que en el Camp Nou no provoca consenso... Aunque no se quiere abordar hasta concretar el fichaje del central.
Tal como hiciera en el fichaje del centrocampista, el presidente Bartomeu decidió liderar personalmente las negociaciones por De Ligt, explicándole al jugador el proyecto deportivo del club azulgrana, siempre liderado por Lionel Messi pero dirigido a un medio y largo plazo en el que su figura obtiene absoluta trascendencia, dándole la consideración de jugador de referencia.
Ahí entra otro factor, el deportivo, que también ocupa al jugador y en el que se le ha querido tranquilizar. Aunque hace meses se conoce ya la salida de Vermaelen al acabar el curso, la plantilla mantiene a Piqué, Lenglet, Umtiti y Todibo, entendiéndose necesaria la marcha de uno de ellos.
La posible venta de Umtiti sería un alivio económico para el Barcelona, tanto por lo que se ingresara de traspaso como por el ahorro de salario, aunque el club mantiene escrupuloso silencio al respecto, de la misma manera que con la rumoreada cesión de Todibo.