BARCELONA -- Antoine Griezmann retomó el protagonismo en las horas previas del partido entre Francia y Turquía en Estambul al reconocer en una entrevista concedida a la televisión gala que ya sabe “donde jugaré la próxima temporada”, aunque, fiel a su faceta de showman, evitó citar el nombre del Barcelona, su destino más probable, o de cualquier otro club.
“Y también sé donde jugaré en siete años. Solo puedo revelar esto: Miami!”, bromeó el delantero francés, ambiguo con su futuro inmediato y que dio a entender, sin embargo, que tras su próxima aventura futbolística encaminará sus pasos hacia la MLS, muy posiblemente en el Inter Miami de David Beckham, ocupado en reclutar a estrellas de primer nivel para el equipo que debutará en 2020 en el torneo americano.
Tras desvelar su decisión de abandonar el Atlético de Madrid al acabar esta temporada, Griezmann no dio a conocer cuál será su destino, justo once meses después de anunciar su permanencia en el club colchonero a través de un documental que provocó tal estupor en Barcelona que su fichaje pasó de ser deseado a poco menos que rechazado en el Camp Nou.
Ahora, sin embargo, el delantero francés, de 28 años y cuya cláusula de rescisión será de 120 millones de euros a partir del 1 de julio, parece llamado a jugar en el Barça, más aún después de que tanto Pep Guardiola como Thomas Tuchel descartasen, en primera persona, cualquier interés de Manchester City o PSG por el fichaje.
Griezmann juega con el tiempo y mantiene en secreto el nombre del equipo para el que jugará a partir de la próxima temporada. En Barcelona, sin embargo, su nombre es capital entre los jugadores que fichará el club azulgrana este verano