<
>

El Barcelona trabaja en solucionar los contratos de sus jugadores cedidos

BARCELONA -- El Barcelona mantiene nueve futbolistas cedidos en otros clubs, siete de los cuales deben regresar a su disciplina el 30 de junio (por Emerson y Miranda hay un año más de contrato con Betis y Schalke) y en cuyo futuro trabaja sin saber a ciencia cierta el escenario exacto el club azulgrana.

El caso de Philippe Coutinho es el principal, pero no único, que ocupa al Barça. El Bayern, donde está cedido oficialmente hasta el 30 de junio, no se ha manifestado públicamente respecto a sus intenciones aunque parece utópico pensar que haga efectiva la opción de compra que tiene por su fichaje, por lo que el Barcelona trataría de encontrarle otro destino, en el peor de los casos en forma de cesión.

También debe tratar los casos de Todibo y Rafinha, que no parecerían de entrada con opciones de reintegrarse a la disciplina del club, de un Cucurella a quien el Getafe sí estaría en disposición de fichar (al menos antes de que estallase la crisis sanitaria) y de Aleñá, Wagué y Oriol Busquets.

Queda otro caso, del que ni se habla porque no hay mucho que decir: Arda Turan. El turco, cedido a ningún equipo desde que hace dos meses rescindiera con el Istanbul Basaksehir, acaba contrato el 30 de junio con el Barça y quedará desligado definitivamente del club.

Con la temporada paralizada a causa del coronavirus, la principal preocupación en el Camp Nou con sus jugadores bajo contrato que están en otros clubes está en conocer la determinación que se tome respecto al final de esos contratos de esa cesión y aunque se entiende que se acabarían prolongando a través de un acuerdo global apadrinado por la FIFA faltará por ver la disposición tanto de los propios deportistas como de los clubes a los que pertenecen en la actualidad, cuyo interés, obviamente variará según sus circunstancias.

“La solución serán negociaciones individuales, donde jugador y club, incluso un tercero con el que pudiera haber firmado en estos meses, pacten todas las condiciones” declaró Juan de Dios Crespo, jurista especializado en derecho deportivo, al diario El Mundo, en una clara advertencia del vacío legal al que, de entrada, se enfrenta el fútbol profesional en no pocos aspectos.

CASOS CONCRETOS
El Barça atiende sus propios casos diferenciándolos en el interés que tiene, tanto deportivo como económico, en solucionarlos con la mayor prestancia posible.

COUTINHO
El fichaje más caro de la historia del club, llegado desde el Liverpool en enero de 2018 por 145 millones de euros (contando los variables que ya se tuvieron que desembolsar por él), fue cedido en agosto de 2019 al Bayern Munich por 8,5 millones, haciéndose cargo el club alemán de su salario (que en Alemania cifran por encima de los 13 millones) y reservándose una opción de compra por 120 millones, que de acuerdo a todas las informaciones y especulaciones que circulan desde hace meses no hará efectiva.

A Coutinho se le ha relacionado con el Chelsea y con el Tottenham, con el PSG y hasta con el Inter, ya fuera en una operación de traspaso o de cesión nunca confirmada por los clubs teóricamente interesados, o siendo parte de una operación regreso de Neymar al Barça, que desde París tampoco se ha valorado (al menos oficialmente).

Lo que es una realidad es que el Barcelona suspira por su salida definitiva, valorando que debería ingresar contablemente no menos de 80 millones de euros para no perder dinero con un jugador cuyo fichaje ha sido deportiva y financieramente una auténtica calamidad.

TODIBO
El Schalke, donde está cedido hasta final de curso, tiene una opción de compra valorada en 25 millones de euroS. Que atendiendo a la situación actual se contempla difícil que haga efectiva.

En el Barça se contempla a Todibo, bajo contrato hasta 2023, como un activo por el que sacar más beneficio del que podría lograrse deportivamente si regresa a su disciplina en un futuro próximo pero a la vista de la situación actua hay quien no descarta ningún escenario. Aunque el central francés estaría entre los nombres barajados para abaratar un posible fichaje de Lautaro o, quien sabe, Neymar.

RAFINHA
Barça y Celta cerraron su cesión, sin opción de compra, en enero y hasta final de temporada, después de que el mediocampista firmase su extensión de contrato con el club azulgrana por una temporada más, hasta junio de 2021.

En Vigo están tan encantados con su rendimiento que querrían negociar su fichaje definitivo, a la espera de sentenciar su permanencia en Primera División. Pero entienden que su capacidad financiera no alcanzaría para lograr un acuerdo, más cuando el nombre de Rafinha ha sido relacionado con el Inter de Milán como parte de una negociación para fichar a Lautaro Martínez.

CUCURELLA
El Getafe, donde está cedido el carrilero hasta final de temporada, tiene una opción de compra valorada en 6 millones de euros que, al menos hasta que estalló la crisis del coronavirus, se daba por supuesta haría efectiva, manteniendo en ese caso el Barça un derecho del 40 por ciento por una futura venta a un tercer club.

A la espera de saber cómo se solucionan los aspectos legales del final de temporada, se entiende que Cucurella será traspasado.

ALEÑÁ
El canterano se fue cedido al Betis sin opción de compra, por lo que su retorno al Barça está, en principio, sentenciado cuando acabe la temporada puesto que es un jugador con el que, de entrada, sí cuenta la secretaría técnica azulgrana. Claro que habrá que ver cuándo acaba la temporada, si es que acaba, y cómo solucionan los dos clubs, y el jugador, el irse más allá del 30 de junio.

WAGUÉ
Cedido el 31 de enero y hasta final de temporada al Niza con una opción de compra de 10 millones de euros, la crisis del coronavirus cortó de cuajo el crecimiento del lateral senegalés, que tras un inicial periodo de adaptación se ganó la titularidad en los dos últimos partidos de Liga disputados por el equipo francés.

Parece difícil, con todo, que el Niza esté en disposición de hacer frente al fichaje de Wagué por la cantidad establecida pero el Barcelona, que pagó 5 millones de euros por su fichaje en agosto de 2018, contempla su traspaso para mejorar en la medida de lo posible sus cuentas.

ORIOL BUSQUETS
El mediocentro, que pasó por todas las categorías del fútbol base azulgrana desde su ingreso en el club en 2007, fue cedido en agosto de 2019 al Twente, por una temporada y sin opción de compra.

Titular en 20 de las 26 jornadas de Liga, el rendimiento de Oriol Busquets (que no tiene ninguna relación familiar con Sergio) en el equipo holandés ha sido notable, hasta el punto que, entendiéndose improbable que pudiera reintegrarse a la disciplina del Barça por la sobrepoblación de centrocampistas, su figura se tiene en cuenta para un traspaso, cuando pueda acabarse la temporada.