Edgar Ricardo Jerez fue el portero de Comunicaciones en el partido ante el Boca Juniors de Diego Armando Maradona
No cabía un alfiler. “La expectativa fue grande, el estadio estaba lleno, había gente por todas partes, hasta en la gramilla. Muchos aficionados no fueron por Comunicaciones, llegaron a ver a Boca Juniors y en especial a Diego Armando Maradona”.
No falta la emoción en el relato de don Edgar Ricardo Jerez, el portero estelar de Comunicaciones aquel 27 de enero de 1982. Era un partido amistoso ante Boca Juniors, de Argentina, con Diego Maradona en sus filas.
“Comunicaciones fue un equipo de Guatemala que siempre buscó enfrentar a equipos grandes del extranjero, también jugamos ante el Corinthians, de Sócrates. Comunicaciones no tenía una banca muy grande, éramos unos 14 futbolistas de primera línea, por decir de alguna manera”, recuerda el ahora entrenador de guardametas en la Federación Nacional de Fútbol.
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— Comunicaciones FC (@CremasOficial) September 24, 2019
De ese partido hay muchas anécdotas. Boca Juniors sacó del centro en los dos tiempos. El árbitro Danilo Ardón fue suspendido varios partidos por ese error. “Yo creo que el árbitro, al igual que muchos, estaba emocionado por tener tan cerca a Maradona. Se desconcentró y no se percató que Boca volvió a sacar en la segunda parte”.
“A nosotros nos perjudicó porque un minuto después cayó el gol de ellos. Fue un error colectivo, nos desconcentramos. Diego Maradona disparó y yo ya iba para donde se dirigía el balón, pero un compañero lo desvío en el trayecto y ya no pude hacer nada”, cuenta Jerez Hidalgo.
El exguardameta fue de los más fríos con la estrella argentina. “Fue un partido normal, tal vez un partido con algo de respeto y con miedo de golpear al jugador. Comunicaciones hizo su mejor esfuerzo. Lo más importante es que uno quiere hacer un buen trabajo, siempre con responsabilidad. Yo estaba tranquilo”.
“En esos juegos se espera un tiro de esquina o alguna acción cercana para saludar a la figura, pero yo la verdad estaba tranquilo, sin desesperarme, dando lo mejor de mí. Maradona se dedicó a jugar, a hacer la magia, tenía una zurda increíble, con su calidad ni siquiera se acercaba a uno”.
Jerez recuerda que al concluir el partido varios de sus compañeros fueron sobre el ‘10’ para pedirle la camisola. “Era un número deseado por muchos, tenía bastante valor. Toda la gente fue sobre él, algunos lo abrazaban, lo saludaba, la verdad fue una fiesta”, concluye el exguardameta. El argentino Ramón Alberto Ramírez se quedó con la camisola de Diego.