Había dos opciones para Anselmi, el pago de los cinco millones de la cláusula de rescisión o presentarse a trabajar en La Noria, no aplicó ninguna

Hace 13 días, Martín Anselmi escribía en su perfil de Instagram "sólo importa que lo hagamos juntos". Al final no fue tan importante, el entrenador argentino se marchó de México a las 06:45 am rumbo a Madrid para firmar con el Porto de Portugal, después de una demora de siete horas y una avalancha de reacciones en su contra. Hizo caso omiso de la notificación legal para presentarse a trabajar con Cruz Azul.

Anselmi se escondió detrás de una pared, en un pequeño pasillo, en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, mientras que su cuerpo técnico lo rodeaba para cuidar que nadie le tomara una foto y evitar el contacto con la prensa. Le pidió al personal de la aerolínea que le permitieran entrar por una puerta especial, pero al final tuvo que entrar a las salas de espera como cualquier persona común.

Anselmi no quería enfrentar los cuestionamientos sobre el "hagamos juntos" que le prometió al Cruz Azul, frase que se desmoronó el pasado martes cuando le notificó a la directiva celeste que tenía una oferta del Porto de Portugal y pensaba tomarla.

Ante la prensa, no hubo ningún mensaje para la afición de Cruz Azul; Anselmi ya pensaba solo en Porto. "Me comunicaron de Porto que hay un acuerdo y que falta resolver algunos detalles nada más", dijo Martín Anselmi, aún técnico del Cruz Azul, a su salida a Madrid, España, para después arribar a Portugal.

A las 21:53, Martín Anselmi entró a las salas de espera, después de enterarse de que su vuelo tenía una demora de siete horas y de rumiar con los medios de comunicación. Una vez adentro de la sala premier (VIP), que cerró a medianoche, se enteró por correo electrónico que era notificado por Cruz Azul para presentarse el viernes 24 de enero del 2025 a trabajar, debido a que tiene contrato vigente con el equipo de la Liga MX.

"Su conducta será tomada como incumplimiento de su Contrato Deportivo de Trabajo", se lee en la carta que recibió Martín Anselmi, al mismo tiempo que todos los integrantes de su cuerpo técnico.

Eso provocó una reacción en el núcleo del entrenador argentino: cuatro de los integrantes de su cuerpo técnico salieron de la sala de espera y dos tomaron un taxi, abandonando el aeropuerto de la Ciudad de México.

Anselmi, en el último paso para abordar el avión, estalló en medio de llamadas a sus representantes y cercanos, para aclarar su situación. Había dos opciones para Martín Anselmi, el pago de los cinco millones de la cláusula de rescisión o presentarse a trabajar en La Noria el viernes 24 de enero del 2025, no aplicó ninguna.

Anselmi se quedó dentro del aeropuerto hasta que abordó el avión que lo lleva a Madrid, España. "Ya selló su pasaporte", informó una fuente al interior de la Terminal 2 del AICM, y a las 06:45 de la mañana, la promesa que había escrito hace unos días de "hasta el final, siempre hasta el final", se destruyó.