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Ya es tu momento, Nacho

Nacho Ambriz está ante su mejor revancha, llevar a la gloria al León...y de momento tiene al equipo esmeralda como líder del Guard1anes 2020

La Fiera del León, aunque yo los conocí con el mote de Panzas Verdes, es hoy en día, el mejor equipo del fútbol mexicano. Sin que los reflectores estén en todo momento sobre los también llamados Esmeraldas, no hace falta que ello ocurra para darse cuenta del gran trabajo que está haciendo, una vez más, Marcos Ignacio Ambriz Espinoza.

Recuerdo en alguna ocasión, luego de un partido narrado en La Corregidora de Querétaro, lo bien que de él se expresó un patrocinador de los Gallos Blancos. Me sorprendió la vehemencia, pero sobre todo, la seguridad que imprimía a sus palabras al referirse, positivamente claro está, al trabajo que hasta ese momento había hecho el seleccionado nacional mexicano en Estados Unidos 1994. Incluso llegó a decirme mi interlocutor, ligado por cierto al mundo inmobiliario del centro del país, que no tardaría en llegar al América. “¿Al América? ¿No estás exagerando?”, le pregunté incrédulo. Sin embargo, él me aseguró que eso iba a ocurrir. Salí del maravilloso inmueble de la capital queretana sin darle demasiada importancia al comentario recibido, aunque no lo olvidé del todo, especialmente porque me llamó la atención que se alabara tanto a quien no le había ido bien cuando dirigió previamente a las Chivas Rayadas del Guadalajara.

Poco después, para mi sorpresa, Nacho dejó al equipo emplumado, en pleno Clausura 2015, luego de las primeras siete jornadas. En ese momento, los resultados no le favorecieron al exjugador necaxista, pero qué curioso fue ver al término de ese torneo cómo el Querétaro disputaba su primera Gran Final de Liga en su historia. A partir de ese instante, decidí poner más atención a su trabajo como Director Técnico.

Mi sorpresa fue mayúscula cuando pocos meses después, exactamente el 26 de mayo, la dirigencia de las Águilas del América anunció la llegada del capitalino para sustituir al uruguayo Gustavo Matosas. No cabía duda ya que las palabras que había escuchado fueron proféticas y no carentes de razón. A mí particularmente me alegraba que un técnico mexicano había sido escogido por encima de cualquier otro nacido allende nuestras fronteras, y más que haya sido en el equipo de Coapa, tan proclive a preferir lo foráneo a lo nacional en muchos aspectos.

La historia de Ambriz no fue fácil con los Azulcremas, aunque ganó la Liga de Campeones de la CONCACAF en 2016. Para septiembre de ese año ya estaba fuera del equipo a pesar de haber sido catalogado el décimo entrenador del mundo. Su siguiente parada fue Aguascalientes, con su amado Necaxa, institución donde debutó y terminó su carrera como futbolista. Ahí ganó el título de Copa del Clausura 2018, al derrotar en la final al Deportivo Toluca con un autogol de Santiago García. A pesar de este logro, su paso con los hidrocálidos fue efímero y salió sin echar raíces con ese escudo que defendió a lo largo de 7 temporadas.

Ya para ese momento, yo no tenía dudas de la capacidad de Nacho como estratega. Y quien menos dudas tenía al respecto, era la directiva del León, quienes de forma inmediata lo contrataron para hacerse cargo del equipo que había venido a menos después del bicampeonato del Apertura 2013 – Clausura 2014. Los resultados no se hicieron esperar y de a poco, con jugadores que fueron adquiriendo su filosofía y estilo de juego, consiguió armar un equipazo que hizo historia en el Clausura 2019 al hilvanar el mayor número de victorias en el fútbol mexicano con 12, destrozando la marca que hasta ese entonces poseía la Máquina Cementera de Cruz Azul, que sumó 10 en la 71-72. Esta racha de triunfos consecutivos tuvo como efecto que, por un lado, lograran la mayor obtención de puntos en un torneo corto de 17 fechas, y por el otro, amarraran el liderato general de la competencia con 41 puntos, convirtiéndose por ello en el máximo favorito para lograr el título. Los Esmeraldas despacharon en ese entonces a los Xolos de Tijuana en los 4os de final y luego batallaron para eliminar al América en semifinales, imponiéndose por mejor posición en la tabla. En la Gran Final contra Tigres y al tener el partido de vuelta asegurado en el estadio León, todo estaba dispuesto para que Ambriz y los suyos levantaran el trofeo de campeón. Sin embargo, el oficio de un viejo lobo de mar como Ricardo Ferretti y las grandes individualidades de los de San Nicolás de los Garza, impidieron que el mejor equipo del torneo se ciñera la corona.

Hoy, Nacho Ambriz está ante su mejor revancha, la que siempre llega para quien sabe esperarla… y trabajarla. Sin desesperarse y mucho menos con aspavientos, ha vuelto a formar un equipo talentoso y con gran dinámica. Los números hablan por sí mismos. A una jornada para que termine la fase regular del Guardianes 2020, los guanajuatenses aseguraron desde hace rato, la cima de la tabla con 39 puntos, producto de 12 victorias, 3 empates y sólo una derrota (contra Cruz Azul 2-0). Son la cuarta mejor ofensiva del campeonato (empatados con Monterrey) con 25 goles anotados y la mejor defensiva con sólo 12 recibidos. Poseedores de una racha de 7 triunfos consecutivos, encararán, una vez más, la Liguilla por el título como el máximo favorito y con un plantel que tiene como base a aquel que perdió la final ya referida en el 2019, donde se destaca al mejor jugador mexicano de la Liga MX, Luis Montes, y a otros como Rodolfo Cota, William Tesillo, Fernando Navarro y Ángel Mena que, con toda seguridad, han vuelto a encender no sólo las pasiones de la afición leonesa sino también la muy justificada ilusión de obtener el octavo título de su historia.

Nacho, éste es tu momento. Nada le vendría tan bien al fútbol mexicano como el que un tipo como tú, ejemplar tanto dentro como fuera de la cancha, lograra por fin conquistar el ansiado trofeo de campeón y al mismo tiempo, levantar sólidamente la mano para ser considerado en dirigir, en un futuro no muy lejano, a la Selección Mexicana de Fútbol, esa misma que tú defendiste tan brillantemente. La mesa está servida.