Te presentamos los argumentos que esgrime Cruz Azul en el recurso interpuesto ante FIFA, de acuerdo con las fuentes consultadas por ESPN
MÉXICO -- Cruz Azul ha interpuesto este martes 9 de julio una demanda ante la FIFA por la forma en qué ha salido el jugador Rodrigo Huescas del club cementero hacia el futbol europeo.
El máximo organismo del futbol mundial ha confirmado el recurso interpuesto por Cruz Azul en una solicitud de información de ESPN, ¿pero qué es lo que señala el equipo mexicano en él, de acuerdo con la información de múltiples fuentes consultadas por este medio?
Primero que todo, al contrato de Huescas con Cruz Azul le restaban 11 meses de vigencia hasta que el mismo martes 9 de julio, casi de manera simultánea en que la dirección jurídica de La Máquina ingresaba su demanda a FIFA, el FC Copenhague de Dinamarca depositaba la cláusula de rescisión del futbolista mexicano de 20 años, tasada en 2 millones de dólares.
Cruz Azul confirmó a ESPN que recibió el dinero, si bien 1.7 millones USD son para el club y 300 mil USD, equivalentes al 15 por ciento de la operación, son para Huescas y sus representantes, Santiago Arbide y Alex García.
Cabe mencionar que desde finales del 2023, una vez que Iván Alonso llegó como director deportivo a La Máquina, Cruz Azul sostuvo diversas reuniones con el jugador y sus agentes para llegar a un acuerdo de renovación, mismo que nunca se firmó a pesar de que, de acuerdo con las fuentes de ESPN, Rodrigo Huescas dio al menos dos veces su palabra y estrechó la mano del presidente del club, Víctor Velázquez, en los últimos cuatro meses.
La nueva oferta, presentada por Cruz Azul a los agentes en una hoja membretada, sellada y firmada por su director administrativo, Antonio Reynoso, proponía una extensión de contrato por 5 años (hasta el 30 de junio de 2029), una jugosa mejora salarial que llevaría a Huescas a ganar un salario equivalente al de los jugadores consolidados del equipo, así como un bono por firmar que se calculaba de la diferencia entre el sueldo actual del jugador y el nuevo ingreso mensual, multiplicado por 12 meses, es decir, un bono equivalente a varios millones de pesos que salía del retroactivo que La Máquina pagaría a la firma del nuevo acuerdo.
El contrato propuesto también incluía una cláusula de rescisión de más de 10 millones de dólares para México y de menos dinero para Europa, con un plan de carrera deportiva diseñado para Huescas en el que se le darían las facilidades para emigrar a Europa como hizo Cruz Azul con otros jóvenes recientemente: el mexicano Santiago Giménez, vendido a Feyenoord en 2022, y el colombiano Kevin Castaño, transferido al Krasnodar en 2023, operaciones en las que el equipo celeste cedió en sus pretensiones económicas para impulsar la exportación de los jugadores conservando un porcentaje de los contratos de Giménez y Castaño para una segunda venta.
Sin embargo, las negociaciones nunca terminaron en la renovación de contrato de Rodrigo Huescas, quien decidió emigrar al FC Copenhague para continuar su carrera en Europa.
Aquí es donde la presidencia y las direcciones administrativa, jurídica y deportiva de Cruz Azul han decidido intervenir para acusar a todas las partes involucradas en la salida del canterano cementero, quien tenía más de una década de formar parte de la institución.
Primero contra AmEro Sports Management, la agencia de Santiago Arbide y Alex García, por presuntamente negociar dentro de la Liga MX y en diversos países de Europa con la carta oferta membretada, sellada y firmada por Cruz Azul, un documento confidencial y que, de acuerdo con las fuentes consultadas, fue utilizado por los representantes para conseguir un jugoso acuerdo de 5 años con FC Copenhague, cuya cláusula de rescisión estaría fijada en torno a los 15 millones de euros.
Además, Cruz Azul acusa ante el Tribunal de Futbol de FIFA tanto a Santiago Arbide como a Alex García de inducir la terminación anticipada del contrato de Huescas sin causa justificada pero con el fin de firmar con otro club profesional, situaciones que van en contra de varios artículos contenidos en el Reglamento Sobre el Estatuto y Transferencias de Jugadores y el Reglamento Sobre Agentes de Futbol vigentes de la FIFA.
En segundo lugar, Cruz Azul acusa a Huescas de viajar a Europa para realizar los exámenes físicos y médicos y posteriormente firmar su contrato con FC Copenhague sin permiso del club, pues ni el jugador ni su agencia comunicaron al equipo cementero su intención de salir, al menos no por escrito. En ese sentido, se señala a Rodrigo igualmente por rescindir su contrato por una causa no justificada, según las fuentes de Cruz Azul.
Por último, la demanda también incluye a FC Copenhague, club que, de acuerdo con los informantes, habría organizado y pagado el viaje del futbolista hacia Europa el domingo 7 de julio sin haber previamente recibido una autorización por escrito de Cruz Azul, toda vez que en La Noria nunca se respondió formalmente a la única oferta que envió el club danés por Huescas, el pasado jueves 4 de julio, en la que proponía abonar la cláusula de 2 millones USD en dos pagos.
Huescas ya es jugador de Copenhague FC y Cruz Azul ha perdido a una de sus jóvenes figuras por una cláusula de 2 millones USD acordada entre todas las partes en el verano de 2022, cuando el futbolista tenía 18 años y estuvo muy cerca de irse como jugador libre al FC Porto de Portugal.
Esa cantidad está al menos 4 millones de dólares por debajo del valor actual de mercado del seleccionado nacional Sub 23, pero lo cierto es que la relación ha llegado a su fin y será el Tribunal de Futbol de la FIFA quien dictamine si existe alguna responsabilidad de Rodrigo Huescas, sus representantes y su nuevo club en la manera en la que han procedido.