PASADENA (Enviado especial) -- El Mundial de Clubes comenzó con una fisonomía inesperada: las distancias que se imaginaban entre los equipos de Europa y el resto aún no se trasladaron al campo de juego y existe la sensación de que cualquier cosa podría ocurrir. Una sensación que excede a la naturaleza propia del juego, a la "dinámica de lo impensado" del fútbol. Como si se hubiese iniciado un contagio entre los representantes latinoamericanos que se apoya en su histórica grandeza y que podría superar toda diferencia económica.
River Plate es uno de los que comenzó su camino con un triunfo y que sueña con dar el golpe. Es uno de los clubes más prestigiosos del planeta y está acostumbrado a ser protagonista siempre. Eso tiene en claro el entrenador Marcelo Gallardo, quien en una entrevista con ESPN F12 declaró: "En la disputa ante rivales de jerarquía podés saber que sos inferior, pero River debe respetar su identidad y su manera de jugar. Siempre debemos pensar en grande".
River jugará este sábado contra Monterrey en busca de un triunfo que asegure su clasificación a octavos de final y que potencie su confianza. El equipo argentino intentará no solo ganar, sino también mostrarle al mundo su identidad, algo que no pudo hacer en la presentación. "Cuando hablo de idea, creo que va en relación a cómo yo sentí el juego, dónde crecí y cómo me formé. Entiendo la historia del club en el que estoy, que ha tenido presencia de equipos históricos, con jugadores históricos, entonces yo no puedo pensar en una manera diferente de jugar. Sé cuál es la exigencia de este club y los jugadores que llegan acá deben conocer esa exigencia", expresó Gallardo.
La falsa dicotomía entre formas y resultado no podía faltar en este torneo, el primero de su tipo. Gallardo afirmó: "No solo hay que ganar, sino que importan las formas. El fútbol es de los futbolistas, jamás les quitaré la creatividad porque a mí no me gustaba que me lo hicieran. Más allá de cualquier innovación, los futbolistas tienen que retomar el control. No todo el tiempo necesitan de la información y de la tecnología. Esos son los jugadores que yo necesito".
La búsqueda del DT de River es clara y sus actitudes confirman sus palabras. Aunque a veces las circunstancias y los rivales impidan el despliegue de las formas pretendidas, la intención es proponer y atacar: "La aspiración está acompañada no solamente de lo que creemos ser sino de lo que queremos ser. Quiero que el equipo mejore con la impronta de pensar en grande y el deseo de ganar cada partido".
Tomarse un rato en medio de un Mundial para reflexionar acerca del juego, de las responsabilidades y de los deseos es algo valioso y que quizás sirva para afrontar los desafíos con lucidez y tranquilidad. A un día del partido que puede sellar su destino en el torneo, Gallardo paró la pelota para ejercitar el pensamiento.
"La competencia nos va indicando el momento de enfoque. Así como la primera parte para nosotros fue el torneo local y la fase de grupos de la Libertadores, el enfoque ahora es este y cuando terminemos de competir acá veremos cómo estamos para lo que viene. Estamos en una evaluación constante porque tenemos que fortalecer nuestra base de funcionamiento de equipo para poder competir hasta el final de los torneos", declaró el DT de River.
El entrenador de River y un análisis respecto de lo que espera del encuentro ante el cuadro mexicano en el Mundial de Clubes.
Acerca del rumbo que ha tomado la Copa del Mundo, Gallardo entiende que hay posibilidades de dar pelea: "Estamos entusiasmados por cómo se va dando esta competencia. Era fundamental arrancar con un triunfo para pasar la etapa de nervios. Ahora tenemos un compromiso contra Monterrey con otro nivel de dificultad. No es fácil para ninguno. Es un torneo que para algunos es al final de sus temporadas y a otros nos agarra a mitad de camino. Todos tenemos muchas expectativas. Es un privilegio poder enfrentarse a rivales de otros continentes y nadie quiere pasarla mal. A partir de que avance el torneo se le sumarán más condimentos".
