El mediocampo de la Selección Uruguaya ha tenido en el camino a Qatar 2022 un crecimiento enorme en su rendimiento, producto lógico de la propia evolución individual de los jóvenes Rodrigo Bentancur y Federico Valverde, quienes además en el cierre de las Eliminatorias han contado con un importante eco en la propuesta colectiva de la Celeste, actualmente dirigida por el entrenador Diego Alonso.
Bentancur y Valverde fueron titulares en el inicio de las Eliminatorias, con el jugador del Tottenham en una posición más central, siendo el futbolista del Real Madrid interior por derecha y Nicolás De La Cruz por izquierda, teniendo más abiertos a Brian Rodríguez y Giorgian De Arrascaeta en el triunfo 2-1 sobre Chile.
Para el segundo encuentro, Tabárez pasó a un 4-4-2, con Bentancur y Valverde formando el doble cinco, dando ingreso a Nahitan Nández para que juegue de ocho y manteniendo al extremo Brian Rodriguez, quien en la derrota 4-2 ante Ecuador en Quito debió hacer la banda izquierda.
A fines de ese 2020, el Maestro no podía contar con Matías Vecino, quien había sido una de las figuras camino a Rusia 2018, y le daba minutos a Mauro Arambarri y Lucas Torreira, quienes afrontaban sus primeras clasificatorias.
Incluso Torreira fue titular en la tercera fecha (victoria 3-0 sobre Colombia) ante la ausencia de Valverde. Nández, Bentancur, Torreira y De La Cruz fueron los volantes escogidos por Tabárez para comenzar jugando en Barranquilla, mediocampo que se repitió en la derrota ante Brasil, último encuentro de la Celeste en el 2020.
Para junio del año siguiente volvieron a estar a la orden Valverde y Matías Vecino, ambos titulares con Bentancur en el 0-0 ante Paraguay donde Tabárez colocó a tres zagueros (Cáceres, Godín y Giménez) y a Gio González y Matías Viña como carrileros.
El mediocampo celeste continuó viviendo varias metamorfósis, lógicas considerando que también debía acompasar la evolución de sus principales volantes (Bentancur es categoría 1997 y Valverde 1998), quienes iban encontrando en sus respectivos clubes las posiciones donde se sentían más cómodos y descubriendo propias virtudes al experimentar en otros roles.
Por ejemplo, Bentancur con 22 años era titular en Rusia 2018 siendo la punta más adelantada del rombo de Uruguay, y Valverde en el Mundial sub 20 del 2017 era el volante central de la Celeste, mostrándose polifuncional (llegando a ser lateral derecho) en el Real Madrid.
A la vez que ellos crecían, se equivocaban y corregían, el combinado celeste también entendió que estos dos jugadores debían asumir el liderazgo futbolístico del equipo. Valverde comentaba en ESPN en la previa a la Copa América 2021 que le gustaba esa responsabilidad y que la asumía con alegría y seriedad, aunque tal vez el rendimiento o la idea colectiva no se correspondía de la mejor manera con las características individuales de estos dos jugadores.
Sin Luis Suárez ni Edinson Cavani, y con un 4-3-3 (o 4-5-1) con Vecino como eje central y Bentancur y Valverde como interiores, Uruguay cosechó siete puntos en la triple fecha de setiembre. El mediocampo (con Brian Rodríguez y De Arrascaeta en las bandas) se repitió en el 0 a 0 ante Colombia, y luego frente a Argentina se decidió pasar a línea de cinco, considerando además que Bentancur estaba suspendido por acumulación de amarillas.
En el 1-4 ante Brasil fue un 4-4-2, con Valverde volcado a la derecha y De La Cruz sobre la izquierda (Vecino y Bentancur en el doble cinco). En su última doble fecha como DT de Uruguay, el Maestro Tabárez no pudo contar con Valverde (lesionado) por lo que ante Argentina y Bolivia jugaron Torreira, Nández, Vecino y Bentancur.
Diego Alonso asumió en diciembre y a fines de enero en Asunción confió también en Vecino, Bentancur y Valverde, que llamativamente jugó por izquierda, siendo el puntero Facundo Pellistri quien le daba profundidad al equipo por derecha. “Había visto a Valverde jugando allí en el Deportivo La Coruña en la temporada 2017-2018”, le confesó semanas más tarde Alonso a ESPN.
El primero de febrero ante Venezuela, Uruguay se plantó con un 4-4-2 asimétrico, dado que tenía a un puntero en la derecha (Pellistri) y a un enganche sobre la izquierda (De Arrascaeta). Valverde y Bentancur se repartieron el doble cinco, con el del Real Madrid tenía la función de presionar más arriba que el del Tottenham.
Ante Perú y en el partido que confirmó la clasificación celeste, Alonso decidió mantener ese último esquema y otra vez el mediocampo uruguayo mostró buena sintonía con la propuesta futbolística, que trató de canalizar y aprovechar todo el ímpetu de juego y de presión que tienen Bentancur y Valverde.
Para el último partido de las Eliminatorias, se le dio a estos volantes un mayor respaldo a sus espaldas, dado que también fue titular en Chile el mediocampista Torreira (Vecino tenía COVID-19), aspecto que libera más a Valverde y Bentancur, aunque con esta decisión tal vez tengan menos opciones de pase hacia adelante.
Más allá de los esquemas (el 4-4-2 asimétrico o el 4-3-3 que puede transformarse rápidamente en un 4-5-1), lo importante de los mismos es la postura (como ha resaltado Alonso) y los nombres de quiénes los conforman.
Queriendo potenciar a Valverde y Bentancur, la cuestión a resolver es ver si para determinado encuentro y rival lo mejor es que tengan un volante central que los libere o un punta más que sea alternativa de pase en ofensiva. Si bien con la segunda alternativa también tienen la obligación de recibir en zonas más bajas, la primera les genera el compromiso, que también asumen con entusiasmo, de siempre tratar de llegar al área rival para acompañar al delantero del equipo.
Viendo los 23 años de Valverde y los 24 de Bentancur, y considerando a su vez que estamos ante ‘el último baile’ de Suárez y Cavani, es evidente que el Uruguay que se hacía fuerte en las áreas, no quiere perder esa virtud al tiempo que está siendo cada vez más un equipo dominado por sus volantes.
Aquí los mediocampistas (se incluyen enganches o mediapuntas) utilizados por la Selección Uruguaya en su camino a Qatar:
Federico Valverde. 1232 minutos, 14 PJ.
Rodrigo Bentancur. 1229 minutos, 16 PJ.
Nahitan Nández. 915 minutos, 13 PJ.
Matías Vecino. 793 minutos, 11 PJ.
Lucas Torreira. 602 minutos, 11 PJ.
Giorgian De Arrascaeta. 549 minutos, 8 PJ.
Nicolás De La Cruz. 435 minutos, 9 PJ.
Facundo Torres. 238 minutos, 5 PJ.
Mauro Arambarri. 179 minutos, 10 PJ.
David Terans. 45 minutos, 2 PJ.
Agustín Canobbio. 44 minutos, 2 PJ.
Manuel Ugarte. 38 minutos, 2 PJ.
Fernando Gorriarán. 31 minutos, 3 PJ.
Gastón Pereiro. 31 minutos, 3 PJ.
Gabriel Neves. Un minuto, 1 PJ.