Estefanía Banini, mediapunta de la Selección Argentina, mostró todas sus condiciones ante Italia, en el debut con agónica derrota de la Albiceleste por la Copa del Mundo de Australia y Nueva Zelanda 2023.
En los minutos iniciales del encuentro, cuando las europeas empezaban a controlar tímidamente el trámite de juego, la crack del Atlético Madrid fue la primera en levantar al Eden Park de Auckland.
Pegada a la banda izquierda, Banini se convirtió en un problema para Barbara Bonansea, Manuela Giugliano y Lucia Di Giuglelmo.
Con gambetas cortas, pasando el balón por encima de los pies de sus rivales y aprovechando el ancho y el largo de la cancha, la mendocina ganó metros en reiteradas ocasiones cuando su equipo lo necesitaba.
Tratando de asociarse con Florencia Bonsegundo, otra de las históricas de la Albiceleste, y encarando hacia el arco custodiado por Francesca Durante, Banini, que se despedirá del seleccionado en esta Copa del Mundo, exhibió sus credenciales rápidamente.
Colaboró en defensa, tiró caños, se hizo cargo de la pelota parada y fue un peligro constante para el equipo de Milena Bertolini, que armó parte de su estructura defensiva para contener a la ex Levante.
En general, la número 22 recibió de espaldas, algo que significó un problema cuando la perdió cerca de su área pero también constituyó una ventaja al darse vuelta y manejar el balón con la cancha de frente.
Italia, con mayor posesión, la forzó a eso, pero Banini buscó girar y conducir o asistir a sus compañeras sin complicarse sobremanera con la pelota. Cuando contó con espacios, generó peligro, aun sin cristalizarlo en situaciones claras de gol.
A lo largo del partido, las mejores jugadas y asociaciones de Argentina llegaron cuando la pelota pasó por los pies de Banini, que también fue la que más la tuvo del equipo de Germán Portanova.
En los primeros 45 minutos, la multicampeona con Colo Colo lideró a la Albiceleste en toques (50), recuperaciones (8), duelos ganados (6), pases completados (23) y gambetas completadas (5).
Con el importante desgaste del cotejo (y con el conjunto rioplatense un poco más replegado), la injerencia de Banini en el juego fue diluyéndose poco a poco, pero de todas maneras completó un gran debut en el Mundial de Australia y Nueva Zelanda, en el que se erigió en bandera y emblema para soñar con una histórica clasificación a octavos de final.
Finalmente, la Albiceleste cayó sobre la hora ante Italia y definirá su futuro en la competencia en las próximas jornadas, ante Sudáfrica, desde las 21:00 horas del jueves, y Suecia, a las 04:00 del miércoles de la semana que viene.
En el otro partido del Grupo G, las europeas vencieron, también agónicamente, a las africanas.