Una elección especial, sin dudas con un gancho extra para él. Rodrigo De Paul dejó Atlético de Madrid para sumarse a Inter Miami. Claro, en el equipo de la MLS tiene DT argentino, Javier Mascherano, y varios compatriotas, pero uno tiene un plus. Se trata de Lionel Messi, socio estratégico en los éxitos en el Mundial de Qatar 2022 y en dos Copa América con la Selección Argentina. Así se entiende mejor la decisión del 'Motorcito' de la 'Albiceleste', de irse del fútbol europeo para recaer en Estados Unidos.
El jugador formado en Racing Club no quería renovar su contrato con el 'Colchonero' y el club no deseaba que se fuera gratis en 2026. Es más: Diego Simeone pretendía mantenerlo en el plantel. El jugador y la entidad de la capital español se pusieron de acuerdo en que quede en la lista de transferibles y fue De Paul el que optó por continuar en la próxima temporada en el Inter Miami de Lio Messi y el uruguayo Luis Suárez.
Ahora, entonces, De Paul pasa a ser socio de Messi en 'Las Garzas', siendo compañero del Nº10 por primera vez en un club. Juntos, llevan varios años juntos en la Selección Argentina dirigida por Lionel Scaloni, donde cosecharon grandes hazañas, en especial el título en la Copa del Mundo más reciente, la tercera estrella histórica de la 'Albiceleste'.
De Paul es el futbolista con más minutos en la "Era Scaloni", en la que marcó 14 goles. En general, compartió el mediocampo con Leandro Paredes, gran amigo personal, Alexis Mac Allister y Enzo Fernández. Y la dupla con más encuentros compartidos en la 'Albiceleste' es la de Messi y De Paul.
Tras el flojo paso del Atlético de Madrid por el Mundial de Clubes, allí, en Estados Unidos, se lo vio mejor al Inter Miami. Ahora, De Paul, con 31 años, dejó de ser conducido por Diego Simeone para estar a las órdenes de Mascherano, otro exvolante de peso con la camiseta de Argentina.
Por eso, finalizó el vínculo que unía a De Paul y Atlético de Madrid hasta el 30 de junio de 2026. Justamente, en esa fecha se estará disputando el próximo Mundial, en Estados Unidos, Canadá y México, y la meta del mediocampista combativo es continuar bajo la órbita de Scaloni pero unido en el campo de juego a Messi, quien disputaría su última gran cita mundialista en esa oportunidad.
El Inter Miami es el quinto equipo en la carrera de De Paul, quien viene de disputar las últimas cuatro temporadas con Atlético de Madrid. Antes actuó en Racing, Valencia y Udinese. La llegada del 'Motorcito' al Atlético se dio a mediados de 2021, luego de su gran participación en la Copa América donde Argentina cortó la sequía de 28 años sin títulos con el triunfo sobre el local Brasil en la gran final.
Ahora, en Miami, De Paul es socio clave de Messi en el club donde el inglés David Beckham, quien jugó en su misma posición, es gran accionista. Y ahí el 'Motorcito' de la 'Scaloneta' puede seguir en sintonía en el juego con el crack rosarino, a un año del Mundial, donde ambos pretenden volver a ser compañeros e ir en busca de otra proeza. Y Mascherano afirmó: "Es un jugador de jerarquía, campeón del mundo con Argentina, lleva mucho tiempo jugando en Europa. Los buenos jugadores siempre nos gustan".
De Paul y Messi tienen una relación estrecha, de gran camaradería, ya que estuvieron hombro a hombro en los momentos futbolísticos más históricos de Argentina de los últimos tiempos. Al volante lo une una amistad con el delantero, siempre comparten charlas y comidas en la Selección, siendo un compinche especial, similar al caso con Paredes, quien retornó a Boca.
Más de una vez, De Paul explicó que Messi "crea disciplina sin decir una palabra". Juntos, con otros jugadores argentinos, tratarán de guiar a Inter Miami en la MLS y las competencias regionales, con la mirada puesta en el próximo Mundial. El ex Racing tratará de elevar el nivel de la zona media del equipo y asistir al 10 y a Suárez. Una decisión con cambio de vida incluido, siempre con Lio como aliado.
La lesión que lo asustó en pleno Mundial y la ayuda del 10
"No sabía qué hacer, porque después de Holanda nosotros teníamos cinco días, me parece, entonces el médico me dice: 'Perdete este y de última con cinco o seis días vas a estar mejor, o podemos ver de intentar'. Pero yo no sé si vamos a jugar la semifinal, no sé si después me van a volver a convocar en cuatro años, puede ser mi último partido en una Copa del Mundo, no me lo puedo perder. Entonces me dice que hay un 80% de que me rompa más y te quedés afuera de todo. Todo eso jugaba en mi cabeza. Fui a la habitación, voy a hablar un rato con el 'Enano' y me dijo: 'No jugués'", contó De Paul sobre la charla con Messi.
El 'Motorcito' ahondó sobre las palabras de Leo y señaló qué consejo le dio Tini, su novia: "No jugués, me dijo, yo te voy a llevar a la semifinal, vos la semifinal la vas a jugar. Y él sabe que lo adoro y le digo: 'Bueno, Leo pero voy a decidir yo, dejame decidir', y él se quedó como diciendo...'¿no me escuchaste?'. Y ahí quedamos, medio ahí, yo me voy para mi habitación también, me puse a llorar. Lloré mucho esos días, porque era muy difícil y aparte salió la noticia, entonces todos preocupados, mi vieja... Y bueno hice una videollamada con Tini, ella me dijo: 'Hacé lo que vos sientas que no te vas a arrepentir', yo siento que tengo que jugar, pero también está todo lo otro, me puedo romper más, no puedo jugar, y ella me volvió a decir: 'Hace lo que sientas, ahí no te vas a arrepentir'".
El propio Messi, uno de sus más cercanos en la Albiceleste, lo acompañó a hacer la prueba para ver si podía ser de la partida: "Me fui a acostar y al otro día, que era el día del partido, a la mañana me vino a buscar el profe con el GPS y me dice, tenés que llegar a tales números en velocidad y corriendo, si vos llegas estás para jugar. Yo había terminado la charla con el 'Enano' la noche anterior, veo que sale de la habitación con el mate y me dice 'Vamos, yo te banco, si vas a probar yo te banco'".
"Me acompañó, se quedó sentado en una pelota con el mate. Las dos tres primeras que hago, yo tenía que hacer unos skipping y salir en velocidad para llegar a los números que él me pedía y cuando hago la segunda, que yo iba despacio, lo miro y él mira el GPS y me hace (con la cabeza), 'No está'. Y quedaban dos, tres más y bueno y en esas dos, tres más dije cierro los ojos y si me rompo ya no juego más, pero voy a probar. Lo hago y salgo rápido y, yo el dolor lo sentía pero lo aguantaba, sabía que lo iba a aguantar. Probé esas más, llegué al número y no se abrió más", recordó.
"Leo estaba ahí, tenemos unos videos ahí probando. Después de eso fui a hablar con Leo y con el técnico y le dije que yo estaba y me dice: '¿Qué fue, un milagro?'. 'No, pero estoy bien', le digo 'sabés que yo no te puedo sacar a los 10 minutos en los cuartos de final de una Copa del Mundo', le digo: 'No, no, quedate tranquilo'. Ahí para mí fue de mucho orgullo, de mucha admiración, porque él completamente me dejó decidir, él me escuchó a mí y confió en que si yo le decía que estaba, estaba y que si le decía que no estaba, no estaba", concluyó.
Lo que valoró Messi del acercamiento de De Paul
En 2024, en Luzu, el mediocampista explicó: "En el recambio de la camada anterior a esta, desde mi lugar medio caradura intenté sumar a Messi al grupo. Desde mi lugar, me le acercaba a él. Con el tiempo, me di cuenta que él valora que lo sumen y lo bajen de su lugar de ídolo".
"Es un botón, parece que no le pasa el tiempo. Sigue siendo el mejor de todos. Lo disfruto todos los días, el día que él lo decida no quiero quedarme con nada. No habrá otro como él. Siempre vamos a sentir que nos puede dar un montón. Hay que sacarle todo tipo de presión. Todo lo que pedaleó, lucho, sufrió y se tuvo que comer un par de garrones. Todo lo que vino sobre el final, es también un ejemplo al esfuerzo y no darse por vencido. Fuera de la cancha también es un gran ejemplo", comentó.
La charla entre ambos tras el duro debut mundialista
Post-derrota ante Arabia Saudita, en la apertura de Qatar 2022, dejó huella. Un año después, en "Campeones", de Star+, De Paul comentó: "Nos costaba digerir lo que había pasado. Nada ayudaba, porque uno está ahí adentro, te hacés mucho la cabeza. Y Scaloni decide al otro día, después de entrenar, en una práctica de mucho silencio, en la que no había joda, ni nada, darnos la tarde libre para ver a la familia, para cambiar la cabeza, porque al final todo seguía. Yo, de manera muy personal, decido no avisarles a mi vieja, a mis hermanos, a mis amigos, que tenía la tarde libre".
"No dije nada y, cuando me subo al ascensor, estaba el 'Enano', y le pregunto qué hacía y me dice que prefería que no lo vieran los chicos, un poco para no mostrar esa cara. Y le dije "vamos para la pieza". Nos acostamos y yo escuchaba que él daba una vuelta para acá, otra para allá, yo lo mismo, entonces le digo: '¿No te podés dormir, no?'. Me dice que no, y entonces le propongo hacer unos mates", agregó.
"Terminó siendo desde las 14 horas hasta la hora de la cena. Nosotros dos solos en la habitación. No había nadie, porque estaban todos con sus familias. Y ahí sí, hubo mucha charla. Y en esa conversación fue al revés de lo habitual en mí: fue él quien me transmitió todo a mí. Hablamos de todos los panoramas posibles. Porque nosotros, contra México, si empatábamos o perdíamos, nos volvíamos. A mí todas esas cosas me daban mucho miedo, ansiedad, nervios. Y lo noté con una seguridad bárbara. Si bien hablamos de todo lo que podía pasar, pero lo noté con mucha seguridad. Palabras más, palabras menos, me dijo que era nuestro Mundial, que iba a ir todo bien. Ahí no importó tanto lo que me dijo, sino cómo me lo dijo, cómo me transmitió el mensaje. Y bueno, ahí salimos a cenar y ya al otro día fue otra cosa. Cambió todo", expresó.