Argelia no llega a la Copa Africana de Naciones solo con la intención de competir: llega con la necesidad de reafirmarse. Tras años de altibajos y eliminaciones prematuras, el seleccionado norteafricano encara el torneo continental como una prueba decisiva en su camino hacia el Mundial 2026, donde se cruzará con la Selección Argentina en la fase de grupos.
Para Lionel Scaloni y su cuerpo técnico, el certamen en Marruecos, a partir del 21 de diciembre, será una oportunidad clave para tomar nota. Argelia es talento, intensidad y carácter, pero también un equipo en plena reconstrucción. Entender cómo juega hoy, qué busca su entrenador y dónde están sus grietas puede marcar diferencias cuando el cruce sea por los puntos.
Argelia y el ciclo con Vladimir Petković al mando
El proyecto actual de Argelia está encabezado por Vladimir Petković, un entrenador con experiencia internacional que asumió con un mensaje claro: orden, disciplina y pragmatismo. Su llegada marcó un quiebre con ciclos anteriores más apoyados en la inspiración individual.
En sus declaraciones recientes, Petković insistió en la importancia de la unidad del grupo y la eficacia, alejándose de promesas grandilocuentes. El DT sabe que el primer objetivo es reconstruir confianza y competitividad, y que la Copa Africana de Naciones será el escenario donde su idea quedará verdaderamente expuesta.
Cómo juega Argelia: intensidad, bandas y transiciones
Desde lo táctico, Argelia suele pararse con un 4-3-3 flexible, que puede mutar a 4-2-3-1 según el desarrollo del partido. El equipo busca presionar alto en momentos puntuales y atacar rápido cuando recupera la pelota, priorizando las transiciones por los costados.
Las bandas son su principal vía de ataque. Con extremos veloces y técnicos, Argelia intenta generar superioridades y desbordes constantes. Para Scaloni, será clave observar cómo retrocede el equipo cuando pierde el balón y qué tan ordenado es su repliegue frente a rivales que le disputan la posesión.
Las figuras de Argelia: experiencia europea y liderazgo ofensivo
Argelia cuenta con futbolistas de recorrido internacional que le dan jerarquía y personalidad. Riyad Mahrez sigue siendo el nombre propio, no solo por su calidad, sino por su rol como líder ofensivo y generador de juego en momentos decisivos.
Junto a él, aparecen delanteros móviles y mediocampistas con despliegue, que aportan dinamismo y gol. Sin embargo, gran parte del desafío del cuerpo técnico pasa por lograr que ese talento individual funcione dentro de un esquema colectivo más equilibrado.
Atento Scaloni: lo que la Copa Africana de Naciones puede revelar
El torneo continental será una radiografía perfecta del verdadero nivel de Argelia. No solo por los resultados, sino por cómo compite: si puede sostener la intensidad durante 90 minutos, si responde cuando el partido se vuelve físico y si logra imponerse ante rivales cerrados.
Para Argentina, observar a Argelia frente a selecciones que le exijan iniciativa será fundamental. Allí se verán sus limitaciones creativas y su capacidad para manejar la presión, dos aspectos clave pensando en un cruce mundialista.
Las claves que Scaloni debería anotar de Argelia
Argelia puede ser un rival incómodo si encuentra espacios, pero también muestra debilidades cuando se le corta el circuito ofensivo. Su defensa, aunque física, puede sufrir ante movimientos rápidos entre líneas y cambios de ritmo constantes.
Scaloni deberá mirar de cerca cómo Argelia defiende en bloque bajo, cómo gestiona los retrocesos y qué tan dependiente es de sus individualidades. La Copa África no definirá el Mundial, pero sí dejará pistas claras de qué versión de Argelia llegará a 2026.
