Lionel Messi tuvo un partido con altibajos en el empate entre Argentina y Paraguay, por la tercera fecha de las Eliminatorias CONMEBOL.
En el inicio del partido se vio a Messi incómodo, con arcadas y vomitando levemente, lo que podría explicar su poca movilidad en el primer tiempo, aunque también llegó al partido con una molestia en un tobillo que lo mandó al banco en su último partido en Barcelona.
Ante la incesante presión en salida de Paraguay, la primera aparición de Messi fue recién a los 7 minutos, con un intento de pase profundo, que por poco no fue bueno.
En los minutos siguientes tuvo más contacto con el balón, pero sin demasiado protagonismo, mas estacionado en un rol de organizador y sin pisar el área.
A los 14 minutos, recibió un golpe de Junior Alonso, pero el árbitro Raphael Claus no cobró nada y hubo un cruce de palabras entre el capitán argentino y el referí.
Más allá de algunos intentos de pase en cortada para Lautaro Martínez, no pudo encontrar una opción de remate de frente al arco, por la cerrada defensa paraguaya.
A los 37 tuvo un remate de tiro libre, que no pudo pasar la barrera. Un par de minutos después armó una buena jugada con giro incluido, pero no pudo meterse en el área, aunque la jugada terminó con un potente remate de Rodrigo De Paul, que desvió el arquero al córner.
Luego del gol de Nicolás González de cabeza, se lo vio a Messi hablando y dando indicaciones a sus compañeros.
En el inicio del segundo tiempo se lo vio más activo, con un par de participaciones en ataque, sobre todo una a los 5 minutos que lo metía en el área con balón domnado, pero anulada por el árbitro por un rebote en la mano.
A los 12 minutos llegó el ansiado gol, con una gran llegada de frente de Leo tras un pase atrás de Giovani Lo Celso, pero todo quedó anulado por la intervención del VAR, por una falta de Nicolás González en el inicio de la acción.
Luego de esta jugada, Messi entró mucho más en juego y a los 17 minutos tuvo un remate dentro del área que se fue por encima del travesaño.
A los 23 armó una buena jugada con Lautaro Martínez, quién prefirió el remate de mediavuelta antes que la devolución hacia el 10, quién entraba al área en velocidad.
Unos minutos más tarde, remató con mucha precisión de tiro libre, pero su disparo fue desviado de manera espectacular por Silva con la punta de los dedos.
A los 32 minutos, Leo armó una buena apilada comenzando de la izquierda hacia el centro, pero no pudo evitar al último defensor antes de quedar en posición de remate.
A los 38 peleó una pelota junto a Nico Domínguez y le dio un buen pase a Ángel Di María para que busque el gol de media distancia.
La última de la noche llegó también de tiro libre, pero ni en el remate original ni en el rebote alcanzó a superar la línea de la barrera.