Viernes 26 de enero de 2024. La sede de Peñarol era un polvorín. Un grupo de hinchas se había autoconvocado a protestar por el período de pases del club. Las incorporaciones de cara a una nueva temporada no conformaban a nadie. “En Peñarol no se e$pecula”, rezaba una bandera. Y mientras los dirigentes estaban en la sala de reuniones, en la calle los hinchas cantaban: “Pongan la guita, la p… que los parió”.
¿Qué había generado la movida y la bronca en la gente? A nadie escapaba que aún estaba abierta la herida por el Campeonato Uruguayo perdido a manos de Liverpool en la temporada 2023. A ello se sumaba que los jugadores incorporados para encarar el año 2024 eran, para la mayoría de los hinchas, “desconocidos”. El clima que se había generado llevó al presidente del club, Ignacio Ruglio, a decirle al técnico Aguirre: “Diego, tenemos que traer algún nombre de peso porque no nos da…”. Pero Aguirre respondió con total convencimiento: “No quiero nombres, quiero jugadores que corran”. Y mientras el presidente aurinegro le hablaba permanentemente para sumar al volante Rodrigo Fernández, el técnico le insistía pidiendo a un tal Javier Méndez, jugador con pasado en Racing y Danubio. “Después veremos si lo traemos a Fernández, quiero a Javier Méndez que lo voy a utilizar en dos posiciones”, le dijo el entrenador al presidente. Otro nombre que había generado diferencias era el de Gastón Ramírez. El volante estaba de vuelta tras su paso por la C de Italia y un fallido intento por tener continuidad en San Lorenzo de Almagro. “El primero que tenía dudas con Gastón era yo y hablé mano a mano con Aguirre y le pregunté”, reconoció el vicepresidente y tesorero del club Eduardo Zaidensztat, en nota con Sport890. Pero la lista contaba con jugadores que, para la mayoría de los hinchas, eran una incógnita como Eduardo Darias. El referido futbolista llegó a Peñarol procedente de Deportivo Maldonado luego de una charla que tuvo Diego Aguirre con su colega Fabián Coito. “Yo cuento el caso particular de Darias. Me lo ofrecen y en Deportivo Maldonado no se destacaba demasiado y fue fundamental la charla que tuve con Fabián Coito, que fue su técnico, y me dijo llévalo, este es para Peñarol. Listo. Alcanzó con quién me lo decía”, comentó el DT en el programa Derechos Exclusivos de Radio Uruguay. Al 29 de enero de 2024, Peñarol había incorporado a: Eduardo Darias (Deportivo Maldonado), Javier Méndez (América Mineiro), Nahuel Acosta (Cerro), Martín Gianolli (Cerro Largo), Guzmán Rodríguez (Boston River), Javier Cabrera (Argentinos Juniors), Byron Castillo (Pachuca), Maximiliano Silvera (Santos), Diego Sosa (Tigre), Gastón Ramírez (San Lorenzo), Washington Aguerre (América MG), y Leonardo Fernández (préstamo desde Toluca). Ese mismo día, el consejero Evaristo González, explotó en Carve Deportiva diciendo: “Me preocupa el periodo de pases. No me están conformando los fichajes. Ingresamos 12 jugadores y faltan, por lo menos, cinco más. Y esperamos que esos cinco que faltan sean los titulares porque hay jugadores que pintan bien, pero están faltando pesos pesados. La idea no es llenar a Peñarol de jugadores y jugadores, sino de jugadores de calidad”, dijo sobre el armado del plantel. El directivo agregó: “Los que estamos trayendo no sé si son mejores que nuestros juveniles. Lo hemos dicho 1.300 veces: cuando vayas a salir a contratar, contratá jugadores importantes que hagan una diferencia. Y eso no lo estoy viendo”. El dirigente habló de la incorporación de un golero diciendo: “El primer golero era el de Olimpia (Gastón Olveira) y se vuelve con que había que poner un millón de dólares. Ta, ahí se fue de las manos, pero el otro que iba a venir, supuestamente, lo perdemos por dos o tres mil dólares por mes. Es un disparate. No lo puedo entender”. Y concluyó diciendo: “No se puede andar ‘chiroleando’ o manoseando un contrato por un mes y medio. Quedan 15 días y me supongo que el presidente y el oficialismo se están dando cuenta de esta situación y que tienen que salir a contratar cuatro o cinco jugadores de calidad”. En ese lapso, Peñarol sumó a otro delantero desconocido para el mercado: un tal Leonardo Sequeira. “Diego (Aguirre, el técnico) me dijo que iba a hacer goles”, reveló el presidente Ruglio. El periodo de pases dejó más dudas que certezas, pero el entrenador carbonero tenía el convencimiento de que los jugadores por los que había apostado terminarían dándole la razón. Y fue así como Peñarol pasó del banderazo de los hinchas por las incorporaciones al festejo de campeón.La bronca de Evaristo González