Apenas tres carreras atrás, Pecco Bagnaia transitaba con comodidad el Mundial 2023 de MotoGP. Tras ganar el GP de Austria (su quinto éxito de la temporada), el campeón gozaba de una diferencia de 62 puntos sobre Jorge Martín, su más inmediato perseguidor en la tabla de posiciones. Superado el Ecuador del ejercicio (Red Bull Ring recibió a la décima cita de las 20 agendadas), el turinés los miraba a todos desde lejos. Pero repentinamente, todo cambió. Llegó el GP de Cataluña en el que milagrosamente salvó su vida al vivir una espeluznante caída, quedar en medio de la pista y ser atropellado por Brad Binder. La surte estuvo de su lado y la KTM solo le pisó la pierna derecha. Maltrecho, Pecco corrió el GP de San Marino y se subió al tercer escalón del podio para reencauzar la temporada. Pero llegó el GP de India, 13ª carrera, y todo empeoró: se fue al suelo y su comodidad en la cima de la tabla se extinguió. Aquellos 62 puntos de hace apena un ratito, se convirtieron en tan solo 13 sobre el español del Pramac.
La tórrida pista de Buddh recibió por primera vez al Mundial de velocidad y fue Marco Bezzecchi el que mejor desenmarañó cada recoveco. Con la Ducati del equipo de Valentino Rossi, el italiano había logrado la pole y su chance en el sprint se truncó por un toque que recibió en la primera curva de parte de su compañero Luca Marini (se fracturó la clavícula y no pudo continuar la cita). La remontada desde el fondo, con un ritmo arrollador, mostró que el potencial estaba para la carrera principal. “Ufff, mi madre, y yo que pensé que venía rápido”, dijo Marc Márquez cuando le comentaron los tiempos de vuelta a los que giraba Marco en el sprint.
Bezzecchi perdió la punta en la partida, pero antes del final de la primera vuelta la recuperó y nunca más la abandonaría para sellar su tercer triunfo en la categoría reina, todos obtenidos en esta temporada (la Argentina y Francia fueron las anteriores). Y Marco también se ilusiona con el título: quedó a 44 de Pecco, cuando hace apenas tres carreras estaba a 68.
Bagnaia marchaba segundo cuando se fue al suelo, en fuerte batalla con Martín. La Ducati oficial había mostrado problemas en algunas de las tantas frenadas fuertes de Buddh. Y en una siguió de largo y terminó en el suelo. Al llegar al box, mortificado por la caída, fue abrazado y saludado por cada integrante del equipo. Pero el daño ya estaba hecho. Porque Martinator se quedó segundo, con la cabeza en los puntos.
De todas maneras, no la tuvo para nada fácil el madrileño, quien en la última vuelta casi pierde con Fabio Quartararo, de vuelta en la pelea con su Yamaha. Martín se pasó de largo, sufrió un leve despiste y la diferencia con el francés se extinguió. El motivo del desliz del español tal vez se encuentre en el calamitoso estado en el que se bajó de su Ducati. Evitó la zona donde se estaciones los integrantes del podio, se fue directo a su box y se desplomó en el suelo mientras pedía agua. Fueron varios los minutos en los que recibió la asistencia de Ángel Charte, el director médico de MotoGP, por la fuerte descompensación que sufría. Finalmente, como pudo, logró subir al podio.
En tres carreras, el Mundial cambió completamente su panorama. Lo que hasta hace poco parecía cosa juzgada, ahora hay que estar atento con la calculadora y todo puede pasar. Quedan siete carreras para el final y el destino de la temporada 2023 tiene un final abierto.