Jorge Martín es el piloto del momento en MotoGP, de eso no quedan dudas. Nada lo detiene al español en los últimos Grandes Premios del Mundial que se vive por Star+, ni siquiera haber estado a punto de ser desfibrilado al cierre del GP de la India. El cierre de la 13ª fecha, primera visita de la categoría al trazado de Buddh, fue un suplicio peligroso para el madrileño, quien llegó extenuado, lipotímico, con una taquicardia paroxística de 230 pulsaciones. “Estaba completamente deshidratado. Le tocaba la lengua y era cartón. Estuvo a punto de usar el desfibrilador”, confesó Ángel Charte, el médico de la categoría.
Así finalizó su domingo en India. El lunes descansó para recuperarse de una gran debilidad y viajo a Japón. En apenas seis días, Martín se recuperó, ¡y cómo! En Motegi, 14ª cita, logró una pole position fulminante y, un rato después, aplastó en el sprint para seguir acortando la brecha con Pecco Bagnaia en la pelea por el Mundial.
“Estoy feliz con el ritmo que pude tener hoy y me da confianza para la carrera de mañana”, dijo Martinator, ya recuperado en lo físico. El español es serio aspirante a la corona de MotoGP con una Ducati oficial, igual a las del equipo de fábrica, pero bajo el techo del equipo Pramac. El español esperaba estar vestido de rojo en 2023, pero la casa de Borgo Panigale optó por ascender a Enea Bastianini, quien pasó más tiempo fuera de las pistas por lesión que arriba de la Desmosedici. Martín tragó saliva, soportó la decepción y se puso una meta: mostrar que estaba para ocupar ese lugar.
El andar de Martín en las últimas carreras fue arrollador. Con los puntos del triunfo en el sprint, el español se puso a tan solo ocho puntos de Bagnaia, tercero en la competencia corta de Motegi (Brad Binder se metió entre ambos con su KTM). Parece difícil que Martinator acepte alguna sugerencia de Ducati para encolumnarse detrás del campeón y la escuadra oficial. No hay chance.
La carrera larga de Motegi, que se verá por Star+, puede marcar un giro en el Mundial: Martín puede irse de Japón como líder del torneo. Si se repitiera el resultado del sprint, el madrileño se iría una unidad arriba. El Mundial arde.