FLOWERY BRANCH -- Cuando compró a los Atlanta Falcons en el 2002, Arthur Blank no estaba buscando ganar dinero.
"Es un negocio sólido, y la NFL es el rey del mundo de los deportes y todo eso", declaró Blank, quien hizo su fortuna como cofundador de Home Depot. "Pero tengo este negocio para ganar. Quieres ganar para tu franquicia, quieres ganar por los aficionados, quieres ganar por la ciudad y el estado, y quieres ganar por los jugadores y por la gente que trabaja aquí. Todo eso es lo importante para mí. Soy muy competitivo y quiero ganar".
Luego de unos primeros años de altibajos en la administración de Blank, los Falcons finalmente se han convertido en ganadores consistentes. El equipo ha tenido cinco temporadas ganadoras consecutivas desde la llegada del entrenador en jefe, Mike Smith; el gerente general, Thomas Dimitroff; y el mariscal de campo, Matt Ryan. Ese es un gran progreso para una franquicia que nunca había tenido temporadas ganadoras consecutivos antes de la llegada de ese trío. Y el viaje del año pasado al Juego por el Campeonato de la NFC sin duda fue otro paso, los Falcons se quedaron a 10 yardas del Super Bowl.
Pero Blank no es el tipo de persona que sólo le gusta estar cerca. Quiere más. Quiere un campeonato de Super Bowl. Esperen, dejemos ese campeonato en plural.
En la conferencia de prensa para anunciar la extensión de contrato de Ryan, Blank dijo firmemente que él y los Falcons no pueden relajarse hasta que consigan sus anillos de Super Bowl.
"Creo que cuando tienes cinco temporadas ganadoras consecutivas y vas a los playoffs en cuatro de los últimos cinco años, estás en el juego", expresó Blank. "Me siento bien por lo que hemos construido, pero también siento que es momento de dar el siguiente paso".
No está solo. Smith tuvo un fuerte mensaje para su equipo en el primer día del campamento de entrenamiento.
"Quería que todos entendieran que no estamos a 10 yardas del Super Bowl", sentenció Smith. "Estamos a 193 días del Super Bowl, que es donde queremos estar al final de la temporada".
Los Falcons no entraron en pánico y realizaron movimientos desesperados en la temporada baja. Pero es fácil detectar el sentido de urgencia en el campamento de Atlanta. Los Falcons no van a decir que es Super Bowl o nada, sin embargo ellos creen que es el momento para que continúen avanzando en esa dirección.
"Cuando una organización se acerca a conseguir un objetivo y no llega ahí, creo que lo primero que tienes que hacer es asegurarte que nadie vive en el pasado", indicó Smith. "Les dije a mis muchachos que hay tres lapsos de tiempo en los que se puede vivir. Puedes vivir en el pasado. Puedes vivir en el futuro. Puedes vivir ahora. Como seres humanos y atletas, vivimos en los tres tiempos, pero la mayor parte del tiempo se tiene que pasar en el presente y tenemos algunas metas que queremos alcanzar ahora".
TRES TEMAS CANDENTES
1. El ataque terrestre tiene que funcionar. Los Falcons claramente han hecho una transición a ser un equipo que lanza primero, y eso no va a cambiar. Pero necesitan algo parecido a un ataque terrestre. Eso es algo que les faltó el año pasado, ya que Michael Turner envejeció y se desinfló.
Los Falcons han sumado a Steven Jackson, y eso debería darles una importante mejoría en la posición. Jackson no necesita ser el caballito de batalla que fue al inicio de su carrera, y los Falcons aún quieren que Jacquizz Rodgers reciba algo de tiempo de juego.
La combinación de Jackson y Rodgers debe ser más que suficiente para darles a los Falcons un ataque terrestre. Eso debería complementar el ataque aéreo al despejar el camino para pases con engaño de carrera. También debe serles útil cuando los Falcons estén en control de los partidos y estén tratando de agotar el reloj.
2. La defensiva necesita una estrella y una identidad. Aunque Smith es de extracción defensiva, los Falcons nunca han tenido una defensiva sólida durante su estancia en el equipo. Eso tiene que cambiar si este equipo realmente va a competir por un Super Bowl.
Debe ayudar que el coordinador defensivo, Mike Nolan, está entrando a su segunda temporada y la mayoría de los jugadores conoce su defensiva. Pero es tiempo de que esta defensiva construya una verdadera identidad, e imagino a Nolan tratando de poner un producto más agresivo en el campo.
También ayudaría a Nolan si puede encontrar a una verdadera estrella de ese lado del balón. El apoyador, Sean Weatherspoon, podría ser ese jugador. Weatherspoon ha sido muy bueno hasta ahora, pero tiene que dar el siguiente paso y convertirse en un jugador prolífico.
3. La presión al pasador tiene que producir. Durante prácticamente toda la era de Smith, la presión al pasador ha consistido de John Abraham y no mucho más. Pero Abraham, de 35 años de edad, fue cortado en la temporada baja debido a su edad. Los Falcons lo reemplazaron contratando a Osi Umenyiora.
A primera vista, parece que Umenyiora debería poder darles a los Falcons lo que Abraham les daba. Pero esta defensiva necesita algo más que a Umenyiora para ir detrás de los mariscales rivales. El equipo espera que uno de sus alas defensivas jóvenes, en especial Jonathan Massaquoi, pueda dar el siguiente paso y complementar a Umenyiora.
Sin embargo espero que Nolan sea más creativo en su segunda temporada y tenga a sus apoyadores y backs defensivos más involucrados en las jugadas de carga.
RAZONES PARA EL OPTIMISMO
A pesar de la derrota ante los San Francisco 49ers en el Juego por el Campeonato de la NFC, los Falcons dieron un gran paso el año pasado al ganar un partido de playoffs en contra de los Seattle Seahawks. Fue la primera victoria de postemporada desde que llegó Smith, y fue importante porque les demostró que los Falcons pueden ganar en enero.
Este ahora es un equipo veterano sin muchos huecos. En el papel, es tan bueno como cualquier equipo de la NFC. Este equipo sabe que su ventana para ganar un Super Bowl está abierta en este momento, pero no va a permanecer así para siempre.
RAZONES PARA EL PESIMISMO
Siempre va a haber dudas acerca de los Falcons hasta que ganen un Super Bowl. ¿Es demasiado bueno Smith? ¿Ryan tiene lo necesario para ganar el juego grande?
Esas preguntas aún persisten. Y, con esas interrogantes, hay mucha presión. Aún queda por ver si este equipo puede manejar ese tipo de presión.
EN LA MIRA
por Rafael Zamorano
Está claro que el lado del balón del que más se hablará en Atlanta en las siguientes semanas será el ofensivo. Por un lado se encuentra la jugosa extensión de contrato que el equipo le entregó recientemente al mariscal de campo Matt Ryan, por el otro está el aporte que esperan los Falcons del corredor veterano Steven Jackson, y no podemos olvidar que el ala cerrada Tony Gonzalez ha mencionado que ahora sí se trata de su última temporada de NFL, luego de coquetear con el retiro esté año.
Sin embargo, lo que más me preocupa de los Falcons está al otro lado del ovoide, y tiene que ver con cuánta presión serán capaces de generar en contra de los pasadores rivales. Personalmente, no estoy seguro de que el reemplazo de John Abraham por Osi Umenyiora sea una mejoría significativa, si es que es una mejoría, y al otro lado considero a Kroy Biermann un excelente jugador de rol, pero hasta allí.
¿Están listos para contribuir en momentos claves los alas defensivas Jonathan Massaquoi y Malliciah Goodman, sobre todo ahora que Atlanta planea utilizar a Biermann como apoyador en situaciones específicas de juego? Los Falcons volverán a ser un equipo de respeto durante la campaña regular --y volverán a ser dominantes en los confines del Georgia Dome--, pero si este cuadro desea dar el siguiente paso en la postemporada y regresar a un Super Bowl, más les vale que sí. Anotar puntos a manos llenas sigue siendo solamente la mitad de la ecuación.