Por segunda jornada consecutiva para iniciar la temporada regular del 2022, un quarterback se hace con los máximos honores en nuestros reconocimientos individuales semanales
Vaya número de actuaciones individuales estelares nos regaló la segunda jornada de la campaña regular. A diferencia de la primera semana, cinco quarterbacks se hicieron presentes, aunque con seis representantes, los receptores abiertos tuvieron la mayor representación.
También, hay que mencionar que dos novatos hicieron su debut en nuestro cuadro de honor semanal. Fueron, en total, tres defensivos los que aparecieron en nuestro listado este domingo.
En una fecha de grandes remontadas, era claro que iba a haber nombres de sobra para candidatear al puesto de honor. No sorprende, por lo tanto, que uno de los quarterbacks involucrados se haya quedado en el trono para la Semana 2.
Sin mayor preámbulo, presentamos al Coloso de la Semana 2, seguido por los nombres que se ganaron un sitio en las menciones honoríficas, como siempre, en estricto orden alfabético, al tiempo que reconocemos a lo mejor en el plano individual de la primera jornada de acción de la campaña regular:
Tua Tagovailoa, quarterback, Miami Dolphins
Una semana después de meterse sorpresivamente entre los mejores cinco quarterbacks de la fecha inaugural de la temporada regular, Tua Tagovailoa se alzó como el jugador más destacado de la segunda jornada en la NFL.
El pasador de los Dolphins tuvo un inicio incierto, tirando dos intercepciones. Una ocurrió en la primera serie ofensiva de Miami en el juego, y otra dentro de la pausa de los dos minutos antes del entretiempo, permitiendo a los Ravens responder con un touchdown que, en ese momento, estiraba la ventaja de Baltimore a 28-7.
Luego, comenzó el show de los Dolphins.
Miami respondió con una serie de anotación que culminó con pase a Mike Gesiciki. Después, ya en el cuarto periodo, los Dolphins volvieron a anotar por la vía del pase, de Tagovailoa a River Cracraft.
Entonces, sí se pudieron candentes las cosas para Miami.
Tagovailoa completó dos pases de anotación para Tyreek Hill, y luego de un gol de campo de los Ravens, un segundo pase de anotación para Jaylen Waddle --después de uno en el primer medio--, para completar una de las remontadas más memorables en la historia de la liga.
Tagovailoa completó en total 36 de 50 envíos para 469 yardas con seis pases de anotación por las dos intercepciones. Su promedio de yardas por intento fue de un asombroso 9.4, que junto a su total de intentos por aire del día, deben ayudar a poner a descansar algunas de las críticas contra el pasador de los Dolphins.
De acuerdo a ESPN Stats & Information, Tagovailoa se convirtió este domingo en apenas en quinto jugador en la historia de la NFL en tirar cuatro pases de touchdown en el cuarto periodo de un juego, y el primero desde el 2007, además de que se convirtió en el décimo jugador en la historia de la liga en lanzar para al menos 450 yardas y seis touchdowns en un encuentro.
Sus seis pases de anotación empataron la marca de la franquicia, donde ahora comparte ese récord con los miembros del Salón de la Fama, Bob Griese y Dan Marino.
Tagovailoa está bien lejos de que se empiece a hablar que va camino a Canton, Ohio, y está bien. Al menos, en esta Semana 2, demostró que tiene la brújula que le muestra el camino.
Menciones honoríficas
Nick Chubb, corredor, Cleveland Browns. Con 87 yardas en 17 acarreos, incluyendo tres de anotación --la última llegando dentro de los 2 minutos finales para poner una ventaja transitoria de 30-17 que parecía definitiva--, y tres recepciones para 26 yardas, la actuación de Chubb pintaba para convertirlo en héroe del triunfo de Cleveland, pero los Browns sufrieron un colapso increíble en casa, para perder ante los Jets por 31-30. De cualquier modo, es difícil culpar a Chubb del todo cuando el resto del equipo no brinda el apoyo esperado, por más que se alegue que debió hincarse antes de ingresar en la zona final en su último touchdown para acabarse el tiempo del reloj. Es que, con estos Browns, nunca se sabe.
Jamel Dean, esquinero, Tampa Bay Buccaneers. Decir que la batalla entre Bucs y Saints fue dura es quedarnos cortos, y la realidad es que hubo poco qué destacar en el ámbito individual, fuera de Dean, que le robó dos de los tres pases interceptados que entregó Jameis Winston en la tarde. A Tampa Bay le costó mucho trabajo mover el ovoide durante gran parte del encuentro, pero las dos intercepciones de Dean fueron convertidas en puntos por la ofensiva --un touchdown y un gol de campo--, y fueron seguida por un 'pick-six' del safety Mike Edwards para sentenciar el resultado.
Joe Flacco, quarterback, New York Jets. Después de aparecer en la sección de los peores quarterbacks de la jornada pasada, Flacco se destapó con una actuación reminiscente de sus mejores años en Baltimore. Lanzó 44 envíos, completando 26 para 307 yardas y cuatro touchdowns, para liderar la remontada improbable sobre los Lions. Dos de esos touchdowns llegaron con menos de minuto y medio en el reloj de juego, cuando Cleveland parecía tener amarrado el resultado.
Jared Goff, quarterback, Detroit Lions. Hablando de quarterbacks de los que no se esperaba una salida de cuatro pases de touchdown, Goff sorprendió a propios y extraños con 20 completos de 34 intentos para 256 yardas y cero intercepciones en su domingo, conduciendo a los Lions a una victoria contundente sobre Washington. Completó pases con ocho receptores diferentes, siendo otro jugador que aparece entre nuestras Menciones Honoríficas su objetivo preferido.
Tyreek Hill, receptor abierto, Dolphins. Si quieren saber para qué pagó tanto Miami por Hill, solo hay que ver el encuentro de este domingo. El 'Cheetah' atrapó 11 envíos para 190 yardas, dos de ellos de anotación, para que Miami consumara una de las mejores remontadas en la historia reciente. Los touchdowns fueron de 60 y 48 yardas, dándole a Miami una faceta que no había en el ataque el año pasado. La posibilidad de anotar desde cualquier parte del campo en cualquier momento del partido hace de los Dolphins un equipo distinto al del año pasado.
Aidan Hutchinson, ala defensiva, Lions. El segundo recluta global del pasado NFL Draft tuvo su primera gran actuación como profesional, abusando de la línea ofensiva de los Commanders para atrapar en tres ocasiones a Carson Wentz. Además de eso, se anotó dos derribos para pérdida de yardas y tres golpes adicionales sobre el quarterback, mostrándose imbloqueable en ciertos tramos del enfrentamiento.
Lamar Jackson, quarterback Baltimore Ravens. ¿Cómo puede un quarterback completar 21 de 29 intentos de pase para 318 yardas con tres touchdowns sin intercepciones, y correr nueve veces para 119 yardas con otro touchdown, y no ser el Coloso de la Semana? Bueno, eso pasa cuando el quarterback de enfrente te roba el resultado y los reflectores. Jackson tuvo un partido estelar, con un índice de pasador perfecto durante la mayor parte del encuentro, e imponiendo marca personal con su touchdown terrestre más largo de por vida, una escapada de 79 yardas que parecía haber aniquilado a los Dolphins. También, se hizo con el récord absoluto de la NFL en partidos de al menos 100 yardas por tierra (11), dejando atrás el empate que sostenía con Mike Vick. A pesar de eso, se quedó un poco corto este domingo, con mínima ayuda de la defensiva en la recta final del encuentro.
Aaron Jones, corredor, Green Bay Packers. El corredor titular de los Packers requirió apenas de 15 acarreos para sumar 132 yardas con una anotación en la contundente victoria de Green Bay sobre Chicago que cerró la actividad dominical de la Semana 2. Además, se anotó tres atrapadas para 32 yardas con otro touchdown por la vía aérea, en un juego en el que ninguno de sus compañeros, de cualquier posición, alcanzó las cuatro recepciones.
Christian Kirk, receptor abierto, Jacksonville Jaguars. No sé qué tanto podamos considerar como sorpresa la victoria de los Jaguars sobre los Colts, después de lo que observamos en la Semana 1, pero sí debe sorprendernos que Indy no pudo anotar un solo punto en el partido, Por Jacksonville, Kirk se destapó con seis atrapadas para 78 yardas, incluyendo dos de touchdown, para ponerle música a la victoria de Jacksonville.
Cooper Kupp, receptor abierto, Los Angeles Rams. ¿Otra vez Kupp? Sí, otra vez Kupp. El estelar abierto de los campeones Rams se despachó una vez más con una salida de cinco estrellas, atrapando 1 envíos para 108 yardas y dos anotaciones, como parte de una unidad ofensiva que todavía no encuentra realmente su ritmo. Eso sí, hay que anotarle a Kupp el pecado de un balón suelto perdido en la tarde.
Kyler Murray, quarterback, Arizona Cardinals. Seguro, Murray lanzó una de las peores intercepciones de día, justo a las manos de Amik Robertson, pero ¡vaya manera de compensarlo! El quarterback de los Cardinals condujo una emocionante remontada donde, primero, compró tiempo al mayoreo para anotar por tierra una conversión de 2 puntos clave. Al poco tiempo después, y nuevamente por la vía terrestre, logró escapar de la presión para encontrarse las diagonales cuando expiraba el tiempo reglamentario, y momentos más tarde, conectó en la conversión de 2 puntos que decretaba que el juego se iba a la prórroga. Allí, fue la defensiva la que ganó el partido para Arizona, pero no antes de que Murray colocara un pase perfecto en las manos de Marquis Brown, éste dejándolo caer, que pudo haber sentenciado el triunfo de Cardinals antes.
Amon-Ra St. Brown, receptor abierto, Lions. Jornada histórica para St. Brown, quien empató la marca de mayor número de partidos consecutivos con al menos ocho recepciones, remontándonos a la campaña pasada, apuntando su nombre junto al de Michael Thomas y Antonio Brown. Fueron nueve atrapadas para 116 yardas y dos touchdowns, además de dos acarreos para 68 yardas, en el día para St. Brown, un candidato sorpresivo de inicio de temporada para el premio a Jugador Ofensivo del Año.
Jaylen Waddle, receptor abierto, Dolphins. De nuevo, Hill ha sido todo lo que esperaba Miami, hasta el momento, y nadie está más agradecido que Waddle. Con el 'Cheetah' creando caos por un lado, Waddle tiene toda clase de facilidades del otro, como esta tarde ante los Ravens cuando sumó 11 recepciones para 171 yardas y dos touchdowns en un día de bastante priotecnia a ambos lados del balón.
Marcus Williams, safety, Ravens. No, no podemos ignorar que Williams interceptó dos pases de Tagovailoa en la primera mitad del partido, lo que ayudó en buena medida a que Baltimore saltara a una ventaja amplia sobre los Dolphins este domingo, una que los Ravens no supieron aprovechar. Ya en la recta final del partido, Williams tuvo la oportunidad de quedarse con otra intercepción, la que hubiera sido su tercera del juego, que posiblemente hubiera inclinado la balanza al otro lado. No sucedió, pero Williams al menos ya está teniendo impacto en el backfield de los Ravens en la creación de oportunidades para la ofensiva.
Garrett Wilson, receptor abierto, Jets. El novato de primera ronda ya levantó la mano para decir presente en el ataque de los neoyorquinos durante la segunda jornada, una en la que contribuyó con ocho atrapadas para 102 yardas y dos touchdowns a la espectacular remontada de los Jets en Cleveland. De aquí, el camino parece ser muy corto hasta que se consolide como el receptor abierto primario en el juego aéreo de New York.