El corredor, frustrado por no recibir un nuevo acuerdo, pidió a Indianapolis que lo intercambie a otro equipo
Jonathan Taylor, corredor estelar de los Indianapolis Colts, solicitó al propietario del equipo Jim Irsay, ser canjeado a otra franquicia para la temporada 2023 de la NFL.
El corredor de 24 años hizo esta solicitud luego de la reunión que tuvo con Irsay al final del entrenamiento.
El mes pasado Taylor expresó su deseo de obtener una extensión en su contrato con un aumento en su salario, algo que perdió la esperanza de obtener luego de las declaraciones que Jim Irsay realizó el miércoles pasado en torno a que las mejoras que piden los corredores en la liga están fuera de lugar.
"Hemos negociado un convenio colectivo que tomó años de esfuerzo. Decir ahora que una categoría específica de jugadores quiere otra negociación después del hecho es inapropiado. Los agentes de los corredores están actuando de mala fe", afirmó el propietario de los Colts.
El agente de Jonathan Taylor, Malki Kawa, le respondió al dueño de los Colts a través de sus redes sociales en defensa de su cliente.
"La mala fe es no pagarle a su mejor jugador ofensivo", fue el mensaje que colocó Kawa en redes sociales.
Hace ocho días los corredores estelares de varios equipos de la NFL, entre los que estaba Taylor, se reunieron a través de una conferencia virtual para hablar de cómo mejorar sus sueldos que en promedio son los segundos peores entre todas las posiciones de la liga, sólo están por encima de los pateadores.
Este sábado, con la relación fracturada, Taylor se reunió con Jim Irsay por varios minutos; al salir de la junta anunció su deseo de ser canjeado a otro equipo. El propietario de los Colts restó importancia al hecho.
"Quiero decir; si muero esta noche y Jonathan Taylor está fuera de la liga nadie nos va a extrañar. La liga sigue, no importa quién viene y quién se va. Ya es un privilegio ser parte de la liga", aseveró Irsay.
Jonathan Taylor fue seleccionado al Pro Bowl en el 2021, temporada en la que terminó como líder corredor de la NFL. En tres años con Indianapolis ha sido el eje de la ofensiva terrestre con 3,841 yardas, con un promedio de 5.1 yardas por acarreo y 33 touchdowns.