La pregunta del día para la NFC Oeste es, ¿quién será el Jugador Más Valioso en la NFC Oeste? Nuestros reporteros presentan sus argumentos:
Josh Weinfuss, reportero de los Arizona Cardinals: David Johnson. El entrenador en jefe de los Cardinals, Bruce Arians, ha dicho en múltiples ocasiones durante la temporada baja que desea darle a Johnson 30 toques por partido entre acarreos y recepciones. Existe un beneficio obvio: si Johnson puede continuar el tórrido paso que impuso el año pasado, será la pieza central de la ofensiva y producirá la clase de yardas y touchdowns que pueden regresar a los Cardinals a playoffs. Si no lo hace, no obstante, la temporada de los Cardinals se verá frenada en la línea de golpeo. Las probabilidades dictan que eso no sucederá, especialmente gracias al ingenio de Arians, abriendo a la ofensiva y creando carriles para correr y atrapar pases para Johnson. No obstante, no será sorpresivo que su producción caiga cuando las defensivas se enfoquen en él. Para el término de la campaña, sin embargo, Johnson se afirmará como el Jugador Más Valioso de la división. Sus recepciones de pase, protección de pase, y visión mejorarán esta campaña, convirtiéndolo en el corredor más difícil de defender en la NFL.
Alden Gonzalez, reportero de Los Angeles Rams: Debe ser Johnson. Tuvo una campaña monstruosa en el 2016, liderando a la NFL con 2,118 yardas desde la línea de golpeo y 20 touchdowns. Y su carga de trabajo de hecho podría incrementarse en el 2017. Arians ha señalado que le gustaría ver a Johnson recibiendo al menos 30 toques por partido, y es sencillo ver por qué. Carson Palmer, de 37 años de edad, viene de un año a la baja. Larry Fitzgerald cumplirá 34 a finales de agosto, y el resto de los receptores de los Cardinals se desempeñó muy por debajo de las expectativas el año pasado. Los Cardinals no tienen otra opción más que depender de Johnson, un corredor de élite que también tiene habilidades como receptor. Para el final del año, nadie será capaz de igualar los números ofensivos que registrará Johnson. Ya sea que pueda ayudar a los Cardinals meterse a los playoffs será una historia totalmente diferente.
Nick Wagoner, reportero de los San Francisco 49ers: El mariscal de campo de Seattle, Russell Wilson. Johnson es el mejor jugador en la división, pero Wilson sigue siendo el más valioso. Wilson sigue siendo el mejor mariscal de campo en el sector, y una de las razones principales por las que los Seahawks siguen como favoritos para ganar a NFC Oeste nuevamente. El año pasado, fue la primera oportunidad de Wilson de jugar una campaña completa en que la ofensiva giró en torno a él, aunque lesiones le impidieron jugar tan bien como hizo en la parte final de la campaña del 2015, y todavía así fue capaz de guiar a Seattle hasta la postemporada. Si Eddie Lacy puede aportar algo de estabilidad al juego terrestre y la línea ofensiva muestra aunque sea una mejoría módica, Wilson debe ser capaz de mantenerse sano y conseguir números importantes para mantenerse como el jugador más importante del mejor equipo de la división. Eso debería ser suficiente para encaminarlo al JMV de la NFC Oeste.
Sheil Kapadia, reportero de los Seattle Seahawks: Wilson. No hay misterio respecto a por qué sufrió la ofensiva de los Seahawks el año pasado. Wilson sufrió tres lesiones que redujeron su movilidad y causaron que pesara más de lo que hubiera querido. La campaña del 2016 fue un gran ejemplo de cuánto significa Wilson para Seattle, tanto en el juego aéreo como en el juego terrestre. Cuando está sano, puede compensar las deficiencias de la línea ofensiva, y sin sus piernas, el juego terrestre es mediocre, a lo mucho. Con Doug Baldwin, Jimmy Graham, Tyler Lockett y C.J. Prosise, podría terminar siendo el mejor grupo de receptores que ha tenido Wilson. Asumiendo que su salud aguanta, esperen que recupere su forma del 2015.