NASHVILLE -- La actual temporada baja ha girado en torno a colocar al quarterback Marcus Mariota en posición para tener éxito.
Los Tennessee Titans ejercieron la opción al quinto año de su contrato de novato durante el receso de campaña del 2018, pero Mariota todavía no ha probado que puede ser piedra angular de la franquicia --nunca ha terminado por arriba del puesto N° 13 en Total QBR durante sus cuatro temporadas en la liga-- y no está bajo contrato más allá del 2019.
Han existido un montón de excusas para la incapacidad de Mariota de establecerse firmemente luego de ser reclutado segundo global en el draft del 2015, con lesiones ciertamente siendo factor. Echemos un vistazo a algunos de los motivos más allá del control de Mariota que han contribuido a su trayectoria de altibajos hasta el momento, y el por qué está en mejor posición de cara al 2019.
Sistemas ofensivos
Mariota no ha podido jugar en el mismo sistema ofensivo entre temporadas una vez en su carrera. lidiar con cinco coordinadores ofensivos en cinco temporadas no es una receta para el éxito: Afortunadamente, el nuevo coordinador ofensivo Arthur Smith fue promovido desde coach de alas cerradas para darle un sentido de continuidad a Mariota. El esquema y probablemente la terminología serán muy similares a lo que el ex coordinador ofensivo Matt LaFleur instaló la temporada pasada. Eso es un bono para Mariota, quien estaba emocionado por la noción de poder contar con el mismo coordinador antes de que LaFleur se convirtiera en head coach de los Green Bay Packers.
"Admito que es agradable regresar al edificio y estar familiarizado con lo que sucede", dijo Mariota mientras estaba vaciando su casillero en enero. "Todos serán capaces de salir allá y alistarse para jugar, no tratando de aprender un sistema nuevo".
Habrá algo de novedad al sistema de Smith, pero los conceptos centrales se mantienen. Smith ha estado con los Titans desde antes de que Mariota se uniera al equipo. Conoce las fortalezas de Mariota y las áreas donde necesita mejorar, tanto como el coach que más. Smith también posee un entendimiento del personal en la plantilla de Tennessee. Ahora, su trabajo es encontrar modos de hacer brillar a Mariota y a un talentoso grupo ofensivo.
Armas
Una falta de armas ha limitado a Mariota desde que arribó a Nashville. El ala cerrada Delanie Walker ha sido un consentido de Mariota y el receptor más consistente a lo largo de los últimos tres años, promediando 77.7 recepciones y 898.3 yardas por temporada. Walker proyecta como figura clave una vez que vuelva de una fractura de tobillo sufrida la temporada pasada. En ausencia de Walker durante el 2018, el receptor abierto Corey Davis se estableció como el principal objetivo de Mariota. Davis llevaba paso para su primera campaña de 1,000 yardas antes de que la ofensiva se montara sobre los hombros de Derrick Henry, quien explotó para 625 yardas y ocho touchdowns en diciembre. mantener un sólido juego terrestre debe abrir más carriles para lanzar para Mariota.
La gran adición de agencia libre fue Adam Humphries, un consistente receptor que atrapó el 72.4 por ciento de los balones que lanzaron en su dirección. Pese a medir apenas 5 pies con 11 pulgadas y pesar 195 libras, Humphries no tiene miedo cuando se trata de trabajar por el centro del campo y recibir golpes de los linebackers. Humphries desempeñará un rol integral en la ranura, especialmente en tercera oportunidad.
La selección de A.J. Brown, de 6 pies con 1 pulgada, en la segunda ronda del draft (N° 51 global) brinda a Mariota un objetivo grande con un enorme radio de atrapada. Brown se ganó la vida laborando desde la ranura la temporada pasada (85 recepciones, 1,320 yardas, seis touchdowns), pero también demostró que puede jugar por fuera en el 2017 (75 recepciones, 1,252 yardas, 11 touchdowns). Su habilidad para obtener yardas después del contacto será esencial para la ofensiva de los Titans. Hacer llegar el ovoide a Brown en varias rutas que quiebran al interior y pases pantalla le dará la posibilidad de mostrar su habilidad para jugadas grandes.
Línea ofensiva
El interior de la línea ofensiva sufrió de mala manera durante la pasada temporada, y Mariota fue capturado 42 veces, el mayor total en su carrera. Los guardias Josh Kline y Quinton Spain fueron reemplazados por el caro agente libre Rodger Saffold (cuatro años, 44 millones de dólares) y el recluta de tercera ronda Nate Davis. Saffold debe constituir una mejora significativa, especialmente alineando junto al tackle izquierdo Taylor Lewan. Saffold fue tercero entre los guardias en la métrica de bloqueos de pase exitosos que mide ESPN con datos de NFL Next Gen Stats durante la temporada pasada (mínimo 300 bloqueos), sosteniendo sus bloqueos por al menos 2.5 segundos el 87.4 por ciento del tiempo. Con Spain mudándose a los Buffalo Bills, los Titans cuentan ahora con un elemento que se ajusta de manera más natural al esquema de zonas en Davis, quien debe convertirse en titular en algún punto del 2019.
La defensiva
La defensiva de Tennessee no ha sido un problema, ha sido una fortaleza. En general, la unidad permanece intacta en el 2019, lo que significa una cereza sobre el pastel para Mariota. La escuadra de Dean Pees finalizó la campaña pasada con la tercera mejor defensiva en puntos permitidos de la NFL el año pasado, permitiendo apenas 18.9 por encuentro. Mariota no debe encontrarse en demasiados tiroteos durante el 2019. La fórmula de la victoria para el head coach Mike Vrabel es depender de una defensiva sólida y un ataque terrestre físico.