Todo indica que, por segunda ocasión, tres quarterbacks afroamericanos serán seleccionados en la primera ronda, pero, podría tratarse de la primera ocasión en que los tres se van en el Top-10
Por apenas la segunda ocasión en la historia del draft de la NFL, se espera que tres quarterbacks afroamericanos sean elegidos en la primera ronda: Bryce Young, C.J. Stroud y Anthony Richardson.
Incluso, hay ruido previo al draft en el sentido de que Young, Stroud y Richardson serán elegidos entre los primeros 10 turnos del proceso de tres días que arranca el 27 de abril en Kansas City, Missouri. Esa cantidad de pasadores de raza negra nunca han sido elegidos tan altos en un solo draft.
Después de que dos quarterbacks de raza negra se enfrentaran como titulares en un Super Bowl por primera ocasión, el modo en que se considera a Young, Stroud y Richardson de cara al Combinado de Talento de la NFL en Indianapolis esta semana es otro ejemplo del surgimiento de los quarterbacks afroamericanos en la NFL.
Cuando Donovan McNabb, Akili Smith y Daunte Culpepper fueron seleccionados en la primera ronda del Draft 1999, marcó la primera ocasión en que tres quarterbacks de raza negra fueron tomados en primera ronda. Ese evento fundamental señaló al mundo que los pasadores de raza negro finalmente habían superado una narrativa que jamás se ajustó a los hechos: que supuestamente no eran suficientemente inteligentes, suficientemente duros, o suficientemente valientes para liderar.
Ahora, los pasadores afroamericanos están entre los jugadores más celebrados en la NFL, y el quarterback de los Kansas City Chiefs, Patrick Mahomes, es el rostro de la liga deportiva profesional más poderosa y exitosa. Young, Stroud y Richardson están ansiosos por unirse a ella.
El analista de draft para ESPN, Jordan Reid, está entusiasmado por los tres. Reid cree que son los mejores jugadores disponibles en la posición de quarterback para el draft de este año.
“Son mis primeros tres en este momento. Tengo a Young, Stroud y Richardson”, dijo Reid vía telefónica el otro día. “Y, sí, si todos son [seleccionados en la primera ronda], sería algo que no ha sucedido en bastante tiempo”.
En 1999, los Philadelphia Eagles usaron la segunda selección global para tomar a Donovan McNabb, quien brilló en Syracuse. Un turno más tarde, los Cincinnati Bengals eligieron a Smith, quien fue un destacado para Oregon. Culpepper, quien emergió como un prospecto de primera línea para la NFL durante su tiempo en Central Florida, se fue undécimo global a los Minnesota Vikings.
En esta clase de draft, Young tiene la apariencia de futura estrella de la NFL, cree Reid. Como sophomore en Alabama, Young fue el lejano ganador en la votación por el Trofeo Heisman.
“No hay realmente muchas preocupaciones con él en lo que toca a jugar la posición”, comentó Reid. “Fue un líder fantástico y Alabama, que [la temporada pasada] no fue lo que normalmente es desde un punto de vista personal, no tuvieron a ese receptor abierto de primera ronda que hemos visto en años pasados, y la línea ofensiva fue inconsistente. Él fue realmente muy bueno levantando a todos esos chicos”.
En Alabama, sin embargo, Young apareció listado en apenas 6 pies de estatura. Hubo un tiempo en la NFL en que un quarterback con la estatura de Young no hubiera sido seleccionado en la primera vuelta, mucho menos entre los primeros turnos.
En el Draft 2012, 74 jugadores fueron elegidos antes de Russell Wilson (5 pies con 11 pulgadas), seleccionado por los Seattle Seahawks en la tercera ronda. Pero, luego Wilson ayudó a los Seahawks a ganar un Super Bowl en ruta a convertirse en un futuro miembro del Salón de la Fama, y, bueno, los encargados de la toma de decisiones en la NFL comenzaron a reevaluar sus pensamientos anacrónicos con respecto al tamaño prototipo para la posición.
En el Combinado del 2018, el quarterback Baker Mayfield midió 6 pies con 5/8 de pulgada. Durante el Combinado del 2019, el quarterback Kyler Murray midió 5 pies con 10 pulgadas. Ambos fueron seleccionados N° 1 global en sus respectivos años.
Para Reid, Young es su QB1 en el Draft 2023, sin importar lo que mida Young en el Combinado.
“Incluso si es 5 pies con 10 pulgadas y media, 5 pies con 11 pulgadas, creo que estará bien”, expresó Reid. “Lo hizo [jugar ante el nivel más alto] en la SEC. Estamos hablando de lo mejor de lo mejor en el país. Para mí, eso elimina muchas de las preocupaciones por el tamaño”.
Del mismo modo, Reid encuentra muchas cosas que le gustan en Stroud (6 pies con 3 pulgadas, 218 libras), quien brilló en Ohio State. A nivel colegial, Stroud dominó el arte de jugar quarterback, notó Reid.
“Hablas de alguien que simplemente es un natural jugando en la posición”, señaló Reid, quien fue un quarterback de récords para la North Carolina Central University. “El mejor modo en que lo puedo decir es que, cuando lo miras, es como ir a un partido de béisbol y ver al pitcher as, el pitcher N° 1, poniéndose a trabajar.
“El modo en que juega la posición es exactamente el modo en que deseas que se juegue. Desde un punto de vista de mecánica, hace todo lo que deseas ver. El trabajo de pies, los ángulos en el brazo, todo lo que hace en el bolsillo, es muy pulcro con todo eso. Y, también es capaz de colocar el ovoide en los tres niveles del campo [corto, medio y profundo]”.
Luego, está Richardson, quien aparece listado por Florida en 6 pies con 4 pulgadas y 236 libras, y que es uno de los prospectos que más intriga en el Combinado, independientemente de la posición. De acuerdo a Reid, con Richardson, hay un potencial enorme.
“Siempre habrá un estigma con los quarterbacks atléticos de raza negra, y muchos [analistas de draft] no van a las cintas a estudiarlo”, advirtió Reid. “Es mucho más pulido de lo que la gente dice de él. Puedes escuchar que es un prospecto en crudo, que no es preciso, y cosas así. Pero, pienso que todo eso deriva de la inexperiencia. Ni siquiera cuento la campaña del 2021 con él, porque entraba y salía en cada serie con [otro] quarterback.
“Ni siquiera sabía quién iba a iniciar en cierta serie en los partidos. No cuento eso en su contra. La temporada pasada fue realmente su primera como titular. No fue preciso. Pero es muy natural jugando la posición. Simplemente, no ha sido expuesto a muchas repeticiones de juego. Además, no estuvo jugando con muchos [buenos] jugadores en Florida. El personal a su alrededor no era grandioso. Simplemente requiere más repeticiones de juego. Para él, se trata de recibir esa experiencia”.
Este draft proyecta como trampolín para que Young, Stroud y Richardson comiencen a ganar experiencia en la NFL. Y si el proceso resulta como se espera para ellos, lanzarán una fiesta como si fuera 1999.