BUENOS AIRES -- El delantero de Independiente Leandro Fernández confió que le "destrozó el corazón" saber que estará medio año sin jugar por una rotura de ligamento cruzado, en tanto la dirigencia y el entrenador Gabriel Milito analizarán si contratan un reemplazante.
"Cuando el doctor Chiaradía me dijo, me destrozó el corazón", contó Fernández sobre el diagnóstico que le dio el médico del plantel tras hacer los estudios por imágenes que develaron rotura de ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha. Pasados los 40 minutos del primer tiempo ante Belgrano en Córdoba, el futbolista sintió que se le trabó la pierna.
"No pensé que era tan grave porque nunca tuve una lesión", confesó por Radio La Red el futbolista santafesino, de 25 años y quien el miércoles sabrá cuándo y quién lo operará. Milito se reunirá con integrantes de la cúpula dirigencial para analizar si buscan un refuerzo por el delantero, que recién volverá luego del receso de verano.