Independiente entrenaba en la mañana del martes sin el mediocampista Emiliano Rigoni, en el medio de la negociación con Zenit de Rusia.
Rigoni no se presentó este martes en el predio Santo Domingo, de Villa Domínico, y si bien se aguardaba una información oficial, se estima que la ausencia se enmarca en el proceso de transferencia al poderoso club de San Petersburgo.
Zenit ya contrató a tres argentinos en cuestión de semanas: los atacantes Leandro Paredes y Sebastián Driussi y el defensor Emanuel Mammana.
Mientras tanto, en el predio del rojo, el mediocampista uruguayo Gastón Silva se entrena a la espera de que los dirigentes puedan solucionar los problemas que se presentaron con sus pares de Pumas de México.
Después del entrenamiento en el predio del club de Avellaneda el que habló fue el delantero Lucas Albertengo, quien intenta recuperar su mejor versión.
"Marcar goles ayuda mucho en la confianza y en los últimos partidos me está tocando, estoy contento por eso, pero fundamentalmente porque se están dando los resultados", valoró el santafesino.
Aseguró el atacante que decidió quedarse en Independiente pese al interés de algunos clubes argentinos de Primera por contratarlo porque habló con Ariel Holan y el entrenador le dijo que iba a tener posibilidades, que se quede a pelear un lugar.
"Cuando surgió la posibilidad de algunos equipos, lo hablé y él (Holan) me manifestó que quería contar conmigo y me decidí por pelear un lugar acá", destacó.
Además, y sobre los refuerzos que ya sumó el rojo, valoró Albertengo que "son de mucha jerarquía, han jugado en las mejores ligas y equipos grandes, y eso mejora y aporta mucho".