Peñarol se trajo un tremendo triunfo en su visita a Río de Janeiro: venció 1-0 a Flamengo en el Estadio Maracaná por la ida de los cuartos de final de la CONMEBOL Libertadores.
Si bien se manejó en la semana que el aurinegro podía llegar a formar con una línea de cinco defensas, finalmente Diego Aguirre optó por mantener a los cuatro hombres en el fondo.
El conjunto local se hizo rápidamente del control de la pelota, con Peñarol parado en su propio campo y a la espera de alguna oportunidad para salir de contragolpe. Pero el aurinegro aguantó bien el primer cuarto de hora y comenzó a animarse a mostrar lo suyo.
Precisamente, a los 13’, Javier Cabrera culminó una enorme jugada colectiva del Carbonero y puso el 1 a 0 en Maracaná, marcando un cimbronazo en el encuentro. El gol provocó que Peñarol se viera capaz de hacerle daño a Flamengo, demostró que los brasileños tenían algunos problemas en defensa y también le sumó nervios a los dueños de casa.
Como era de esperarse, los dirigidos por Tite salieron con más ímpetu hacia la ofensiva buscando el empate, aunque les costó crear chances concretas, finalizando muchas ocasiones en centros mal tirados que controlaba Washington Aguerre. Igualmente, Flamengo creció con el paso de los minutos, y el último cuarto de hora fue muy superior al aurinegro, generando varias ocasiones de gol que hicieron al arquero del Manya en figura de su equipo.
Así terminó la primera mitad, con Peñarol manteniéndose en partido y pudiendo encontrar aún alguna escapada de contraataque, pero sufriendo el asedio del Mengao, que antes del entretiempo vivió sus mejores minutos del encuentro hasta ese momento.
Para el segundo tiempo, Tite, entrenador de Flamengo, sacó de la cancha a Guillermo Varela y mandó a jugar a Wesley, que se sumó al ataque como un extremo más, mostrando así que los locales necesitaban un empujón hacia adelante.
A los 51’ se dio una de las polémicas del partido cuando el árbitro Jesús Valenzuela no sancionó penal para Peñarol luego de una mano en el área de Erick Pulgar. Desde el VAR tampoco llamaron al venezolano a revisar la jugada en los monitores.
Minutos más tarde, un nuevo cambio ofensivo de Tite ponía en mayor riesgo al Carbonero, cuando ingresó Carlos Alcaraz en lugar de Pulgar.
El paso de los minutos no incomodó demasiado a Peñarol, que supo mantener su esquema defensivo, presionó cuando era necesario y, por etapas, también supo sufrir.
En los últimos minutos, Flamengo se volcó en su totalidad al ataque, y el conjunto de Diego Aguirre renunció del todo a tener la pelota y se dedicó a juntar sus líneas atrás y rechazar todo balón que cayera en el área.
Finalmente, el Carbonero pudo aguantar el resultado, y así dio un enorme paso para buscar la clasificación a semifinales de la CONMEBOL Libertadores.