BARCELONA -- LaLiga hizo oficial los límites salariales de las plantillas de Primera y Segunda División (el gasto permitido en futbolistas y técnicos) tras el cierre del mercado de invierno y el anuncio significó un golpe de realidad para el Barcelona, que pasó de un saldo de 107.65 millones de dólares de margen positivo al acabar el mercado veraniego de 2021 a uno negativo de 158.67 millones de dólares. El único club profesional con cifras negativas por primera vez desde que la patronal establece estos parámetros.
A la vista de esta situación, el Barça se enfrenta a un final de curso en el que tan fundamental es asegurar la clasificación para la próxima edición de la Champions League (deportivamente se encuentra en buen camino) como aligerar la masa salarial de su plantilla para intentar reforzarla con vistas al futuro. Ya no se trata de los fichajes... se debe dar salida a jugadores en una tarea que ya está encima de la mesa.
Apenas dos días después de que Joan Laporta enfriara la ilusión azulgrana por el fichaje de Erling Haaland, el comunicado de LaLiga vino a confirmar la preocupante situación de un club que, arrastrando una herencia nefasta por la gestión de la directiva de Josep Maria Bartomeu, no ha conseguido durante el primer año de mandato de la nueva junta obtener más ingresos y se ha visto lastrado por la modificación que de las cuentas heredadas formuló el ex director general Ferran Reverter, cuyo impacto aumentó las pérdidas hasta los 528 millones de dólares al cierre de la pasada campaña, muy por encima de los 278 que estimaba en sus cuentas la organización presidida por Javier Tebas.
"El balance del Barcelona es negativo porque sus pérdidas son mayores que la capacidad que tiene de generar ingresos”, advirtió el director general corporativo de LaLiga, Javier Gómez, lo que afectará, de no haber cambios sustanciales, al presupuesto de esta temporada, aprobado por la asamblea de 840 millones de dólares.
"La única solución del club para recuperar límite salarial es a través de plusvalías, ya sea con el acuerdo de CVC o con otros similares”, avisó Gómez, una circunstancia en la que ya está trabajando, con urgencia, el Barça.
SOLUCIONES
Hace ya semanas que el club azulgrana trabaja en una triple vía que alivie esta situación.
Por un lado negocia la venta del 49 por ciento de Barça Studios que le puede significar un ingreso de 384 millones de dólares y mientras cierra los flecos, que no son tan menores, del acuerdo con Spotify ha reabierto la vía de CVC a la que se negó al comenzar la temporada, de la mano de Florentino Pérez y el Real Madrid, y que con los cambios que pretende incluir en la firma le supondrían una inyección de 330 millones de dólares, de los cuales se podrían destinar unos 82 a aumentar la masa salarial.
Al margen de todas esas gestiones, la cúpula deportiva del club se centra en aligerar la plantilla con la venta de algunos de sus futbolistas o la salida de quienes acaban contrato. La marcha de Ousmane Dembélé y Sergi Roberto empieza a contemplarse como muy probable y se confía en alcanzar un acuerdo con el Aston Villa por el traspaso de Philippe Coutinho, que se marchó en enero cedido al club inglés.
También se contempla en los despachos del Camp Nou el considerado necesario traspaso de Samuel Umtiti y se mantiene la puerta abierta a posibles ventas de Sergiño Dest y Clement Lenglet, dándose por segura la salida del portero Neto y trabajándose en adecuar contablemente el intercambio entre Trincao y Adama Traoré con el Wolverhampton Wanderers.
Pero ni saldando con éxito todas esas operaciones, atendiendo a que está también prácticamente cerrada la incorporación del central danés Andreas Christensen, el Barça estaría en condiciones óptimas para entrar con fortaleza en el mercado de fichajes del próximo verano.
Y así se explica que el propio presidente rebajara el tono optimista respecto al fichaje de Haaland porque, advirtió, "hay operaciones que no pueden poner en riesgo al club". Y el golpe de realidad de LaLiga no hizo más que confirmar que las perspectivas en el futuro inmediato no son, precisamente, las mejores.