BARCELONA -- Frenkie de Jong ha tenido que esperar cerca de un mes pero, por fin, ya conoce personal y directamente la posición del Barcelona respecto a su futuro en el club.
Reacio a aceptar su traspaso a pesar del principio de acuerdo entre el club y el Manchester United por ficharle, al mediocampista neerlandés le propuso el Barça, confirmaron a ESPN fuentes cercanas al futbolista, una reducción de salario de entre el 35 y el 40 por ciento de lo que debe percibir esta temporada.
La rebaja se circunscribe al sueldo fijo, que con la reordenación acordada cuando renovó su contrato en octubre de 2020 (que provocó que aquella temporada limitara sus ingresos a poco más de 3 millones de euros) le significa una ficha superior a los 11 millones netos, lo que para el club tiene un costo cercano a los 22 millones y que pretende reducir hasta un máximo de 15 para incluirlo en los nuevos parámetros salariales, siempre por debajo de los 20 millones y que le significaría al jugador pasar a cobrar poco más de 7 millones netos, al margen del bonus por partidos jugados, ya que si supera el 60 por ciento de los mismos tiene asegurados otros 2 millones.
En esa reducción se incluiría el bonus de fidelidad, que asciende a cerca de 3 millones y que el Barça querría renegociar de cara a las siguientes temporadas, lo que provoca las mayores reticencias en De Jong, atendiendo a que en el curso 2023-24 ese concepto le debe reportar un ingreso de casi 10 millones de euros.
Lo que se mantendría tal como está firmado son los bonus por rendimiento y que le supondrían al jugador un premio máximo de 3.2 millones (1.2 por llegar a la final de la Champions, 1 por ganarla, 750 mil euros por conquistar la Liga y otros 250 mil por la Copa, siempre que vaya acompañado de otro título mayor). A estos bonus tendría derecho el jugador si participara en un 60 por ciento de los partidos oficiales, una cantidad que ha superado en sus anteriores tres temporadas.
A LA ESPERA
Después de una primera reunión con Xavi Hernández, en la que el entrenador le trasladó su confianza pero advirtiéndole que debía posicionarse junto al club por los problemas económicos que atraviesa, De Jong, ya en Estados Unidos, mantuvo un encuentro con la plana mayor del club, con Joan Laporta a la cabeza y la presencia de Jordi Cruyff, con quien el futbolista mantiene una relación más cercana.
Fue en dicha entrevista en la que Frenkie reiteró su intención de permanecer en el Barcelona, tras lo cual el presidente le trasladó la necesidad de rebajar cuantiosamente su salario, sin recibir una respuesta inmediata del futbolista, que al regreso de la gira estudiará la propuesta con su representante, Ali Dursun, si bien mantiene que después de haber colaborado con el club cuando se le pidió, entiende que no está obligado a aceptar una reducción tan acentuada de su ficha.
Entre todo ello, sin embargo, el mediocampista sigue sospechando que el club, en realidad, sigue empujándole hacia la puerta de salida.
Quedaría, además, por conocer al detalle los planes del Barça en las temporadas venideras, ya más allá de los casi 10 millones de bonus de fidelidad de la próxima, puesto que en las dos siguientes tiene asegurado un fijo de 18 millones de euros brutos y de 19, más otros 3 de fidelidad, en la última, la 2025-26.
El club azulgrana, a pesar del discurso del presidente, mantiene como mejor solución un traspaso que liberaría mucha masa salarial y facilitaría de forma directa la inscripción de los nuevos fichajes pero contemplando la negativa rotunda que, por el momento, mantiene De Jong, busca una nueva solución a corto plazo con esta reducción de su salario.
La decisión está ahora en manos del jugador, aunque, como se deja claro desde su entorno la razón legal está de su parte por la existencia de ese contrato firmado. Y aunque en los tres partidos disputados en Estados Unidos ha recibido señales claras de que su papel ha dejado de ser, de entrada, indiscutible, su capacidad de resistencia, advierten sus más cercanos, sigue intacta.