BARCELONA -- Esperando a una nueva resolución con el tema de la sanción a Robert Lewandowski, con la impugnación presentada por el Espanyol, el Barcelona se estrenará este miércoles en la Copa ante el Intercity de Alicante, en un partido que Xavi avisó "será muy difícil" y ante el que dejó fuera de la lista de convocados al delantero polaco y a Pedri "para que puedan descansar porque nos viene un calendario muy duro".
Campeón en cinco de las últimas ocho ediciones, la última de ellas en 2021 y tras enlazar cuatro consecutivas entre 2015 y 2018, el Barcelona tiene en el torneo copero "un objetivo claro" en palabras de su entrenador, siempre por debajo de la Liga pero con ganas de "ganarlo" para seguir siendo el dominador de la competición.
"Me gusta este sistema de Copa, a partido único y en el campo del equipo más débil. Es bueno para el espectador, pueden haber sorpresas y debes estar muy atento. Habrá que tener cuidado”, repitió Xavi, quien anunció que Ronald Araújo "saldrá en el equipo titular" y admitió que habrá varios cambios en el once con mayor participación de los futbolistas que han jugado menos minutos en el primer tramo de la temporada.
El técnico avisó que el papel de "favorito claro" en estos estrenos de Copa es un arma de doble filo y recordó que en su etapa de futbolista sufrió eliminaciones sorprendentes contra equipos de menor categoría como es el Intercity, al que presentó como un rival que ya le puso las cosas complicadas al filial en la Liga y que tendrá una motivación extra por el hecho de contar hasta con ocho futbolistas que en su día pasaron por el futbol base del Barça. "Y cuando juegas contra tu ex club estás más motivado, lo que hace que el partido sea más complicado".
UN RIVAL ESPECIAL
El partido no se jugará en el campo habitual del Intercity, cuyo aforo no supera los 4 mil espectadores, y se trasladará al estadio Rico Pérez (donde juega sus partidos el Hercules), con cabida para cerca de 30 mil aficionados y en el que se espera una presencia de más de 20 mil que supondrán "una buena prueba de toque" para un Barça que, según reveló Xavi, tiene claro que el rival no será un simple convidado de piedra.
Fundado en 2017, el Intercity es el primer, y único hasta el momento, club de futbol español que cotiza en bolsa. Curiosamente, desde que se conoció el emparejamiento con el Barça en la Copa sus acciones se han revalorizado en más de un 30 por ciento aunque desde que comenzó a operar en octubre de 2021 su valor ha descendido cerca de un 72 por ciento del capital inicial.
Presidido por Salvador Martí, el club alicantino tiene en el ex futbolista del Atlético de Madrid Juanfran Torres a uno de sus máximos accionistas, decidido a convertir al Intercity en una referencia futbolística.
"Queremos alcanzar el futbol profesional y en ello trabajamos, con una estructura deportiva totalmente profesionalizada y sin ponernos techo”, reveló al comenzar la temporada.
Ello provoca que el club, que tiene uno de los presupuestos más altos de la categoría (la 1ª Federación que es la tercera del futbol español) acumule pérdidas superiores a los siete millones de euros desde su fundación (asumidas por los accionistas con ampliaciones de capital), en que ha logrado el hecho histórico de lograr hasta cuatro ascensos en cinco temporadas, una circunstancia nunca vista en España.
Dirigido por el argentino Gustavo Siviero, que en su etapa de futbolista vivió los mejores días del Mallorca entre 1998 y 2002, el Intercity cuenta con ocho jugadores con pasado en el Barça (Xemi Fernández, Guillem Jaime, Oriol Soldevila, Anong, Benja, Pol Roigé y Cristian Herrera) y aunque actualmente se encuentra en la parte baja de la clasificación mantiene el objetivo de ascender a 2ª División, entrando en el futbol profesional, para de esta manera dejar de ser deficitario y conseguir beneficios gracias a los derechos de televisión.