BARCELONA -- Kilyan Mbappé se decidió por el PSG, a pesar de las reticencias del Mónaco, y formará parte del que es, probablemente, proyecto más ambicioso del fútbol europeo. Se decantó por el club “de mi ciudad”, de acuerdo a lo expresado en una entrevista concedida a TF1, por más que desde julio tuvo sobre la mesa varias opciones. Entre ellas el FC Barcelona.
El Barça descartó a Mbappé y prefirió fichar a Dembélé. Nada que decir. Fue la decisión de sus técnicos, bajo el liderazgo primero de Robert Fernández, el secretario técnico, y con la anuencia al final de Pep Segura, el mánager general plenipotenciario…
Aunque llamó la atención que, según publicó el diario Sport, el 30 de agosto volvió sobre sus pasos y se comunicó con el Mónaco para intentar a la desesperada el fichaje del joven astro, cuando el acuerdo con el PSG estaba ya cerrado.
Se supone que el 30 de agosto, a pesar de todos los discursos oficiales y el optimismo, falso, que se ofrecía en el Camp Nou, comenzaba a contemplarse la imposibilidad de fichar a Coutinho y se entendió que Mbappé sí personalizaría un ‘Plan B’ de primer nivel, del agrado de todo el mundo y comenzando, desde luego, por Ernesto Valverde.
“Es tarde”, le contestó el Mónaco. El acuerdo con el PSG ya estaba cerrado y el mercado acabó como acabó: en un fiasco absoluto para el Barça. Y eso que dos meses antes, a finales del mes de junio, fue al contrario: el club azulgrana fue el que descartó su incorporación, como respuesta al ofrecimiento que le llegó por parte de los agentes del futbolista, ilusionado como, decían, estaba en jugar al lado de Messi.
El Barcelona manejó informes de Mbappé durante toda la temporada 2016-17, después de descubrirlo apenas empezar a despuntar en el Mónaco y por más que hubo quien le presentó como una aparición a la altura del Ronaldo del PSV, en 1994, en el Camp Nou se entendió que no tenía ascendente futbolístico suficiente para entrar en la plantilla.
Y borrado de los objetivos que mantuvo todo el verano, cerró el fichaje de Dembélé confiado en “fichar a otro jugador o quizá dos” en palabras de Roberto Fernández. No fue posible. El Barcelona se quedó en fuera de juego y, desesperado, volvió sobre sus pasos llamando otra vez a Mónaco.
“¿Se puede aún negociar el fichaje de Mbappé?” se preguntó desde el Camp Nou. En Mónaco alucinaron, como en tantos otros lugares, y contestaron que ya estaba concretado su fichaje por el PSG. Fin de la historia. O principio…